La volatilidad de los mercados puede causar grandes pérdidas en las inversiones o, por el contrario, generar ganancias extraordinarias apelando a comprar barato lo que siempre estuvo caro. Todo depende de la estrategia que se siga.
La tentación de especular es grande, pero hacerlo en este momento puede resultar riesgoso. El Merval sube y baja un 5% en una misma semana sin dar señal alguna sobre las tendencias a seguir. Las bolsas internacionales van en la misma línea. El dólar está "pinchado" respecto del peso pero nadie tiene certezas acerca de si esta muerte del billete verde se mantendrá en el tiempo.
Una de las recomendaciones más sensatas en este momento es ser conservador con los ahorros.
Si uno no tiene la seguridad de ganar, es preferible garantizar el capital que tanto esfuerzo costó conseguir. El sentido común nos señala que hay que mantener la calma y, si se debe apostar, hacerlo mirando al largo plazo. Y en este escenario de inestabilidad e incertidumbre, el largo plazo puede ser la familia.
Es posible destinar parte de los ahorros a la educación de los hijos o a un retiro, lo que puede ser una buena alternativa para sostener inversiones mayores a los cinco años. Existen programas nacionales e internacionales para garantizar la educación de nuestros hijos. Aportando una cuota mensual en moneda fuerte por períodos que van de dos a diez años se garantizan estudios universitarios o superiores en importantes universidades nacionales y del exterior.
Con el resto de los ahorros hay que recordar esta máxima: si se tienen necesidades menores a un año, no invertir en la bolsa en este momento. Es muy riesgoso. Se debe mantener la calma, hay que estar atentos al desarrollo de los acontecimientos.
Turbulencias siempre existieron, pero luego siempre viene un rebote interesante. Para algunos analistas, estamos cerca de tocar fondo en esta crisis que padece el sistema financiero, por lo tanto es tiempo de estar atentos a las oportunidades.
Javier Lojo
jlojo@rionegro.com.ar