La cantidad de pequeñas y medianas empresas que piden financiamiento para encarar programas de desarrollo bajó este año cerca del 40% con respecto al 2007, reveló un informe de la consultora Nielsen.
El trabajo -el segundo a nivel de América Latina- fue presentado por el gerente de Nielsen, Marcelo Figueira, por encargo de la empresa Visa, firma que lanzó una campaña de desarrollo de tarjetas corporativas para el sector.
Figueira precisó que, en materia de créditos para el desarrollo, el nivel de préstamos de Argentina "es el más bajo y ha disminuido en el último año".
El profesional precisó que en la anterior medición del 2007 "aproximadamente el 14% de las empresas" decía tener créditos y "este año, es el 8%".
También aclaró que el promedio para la región de América Latina es del 20%.
El estudio presenta ciertos límites, puesto que las encuestas se realizaron en agosto, antes del desenlace de la crisis financiera global.
A nivel regional la consultora realizó 1.200 entrevistas y 122 en el país a los dueños o los principales responsables de pymes cuya facturación anual alcanza hasta 5 millones de pesos y cuya planta de personal cuenta con hasta 50 empleados. Según dijo Figueira "a partir de este año los encuestados informan la presencia de personas cercanas que se convierten en fuentes de financiación" en la medida en que se retiran los canales institucionales.
El estudio indica que en la Argentina el 67% de los encuestados dice pedir créditos a los bancos sólo por cuestiones de emergencia. No obstante, el estudio revela -según Figueira- "un creciente proceso de formalización del sector a partir de una mayor registración legal de las organizaciones". Nielsen indica que en el 2007 la cantidad de pymes que funcionaban como personas jurídicas representaba el 21% y que este año esa proporción subió a 31% del total de firmas, mientras que el resto opera como persona física.