El mercado financiero internacional se encuentra muy inestable. Las fuertes caídas de las bolsas luego del anuncio de la quiebra del banco de inversión Lehman Brothers hacía temer lo peor. Pero la puesta en marcha de un plan integral por parte del gobierno de los Estados Unidos, para asumir las pérdidas incobrables del sistema, disparó el jueves las bolsas en todo el mundo. Europa y Asia vieron reflejada esta suba al día siguiente, con un entusiasmo que no tiene precedentes.
Las oscilaciones que presenta hoy el mercado no son aptas para cardíacos.
En sólo una semana los principales pisos bursátiles del mundo pasaron de tener quebrantos promedio del 10% a ganancias por arriba de estos porcentajes.
¿Qué es lo que puede esperar el ciudadano común frente a esta lluvia de información que, en muchos casos, muestra grandes contradicciones y poco aporta a la racionalidad de los actos?
En primer lugar hay que señalar que no está del todo claro si la crisis financiera internacional alcanzó su piso. Lo que se intenta, a través de la intervención de los distintos gobiernos, es contenerla para que no continúe afectando el sistema en forma sistémica tal como pasó en el crack de 1929, que posteriormente derivó en la gran depresión del ’30.
Ser optimista frente a estos problemas –como se manifiesta el gobierno argentino– es pecar, como mínimo, de autismo. Las crisis financieras pueden tomar a un país en mejor o peor posición, pero siempre termina golpeando sobre su economía real.
Mal que le pese a la administración Kirchner, la Argentina es altamente dependiente de lo que sucede en los mercados interna- cionales y, por ende, modificaciones en el mismo terminan repercutiendo positiva o negativamente en el país.
Pero volvamos al ciudadano que tiene unos ahorros y no sabe qué moneda es la que mejor resguardará su capital. Hoy el mercado trabaja principalmente con tres tipos de monedas para el circuito minorista: el dólar, el euro y el peso local.
* El dólar. Mucha fue la demanda de moneda norteamericana en esta última semana. En la City porteña volvieron a aparecer los tradicionales “arbolitos”, que llegaron a cobrar 3,21 pesos por dólar cuando en el mercado oficial ese valor estaba en torno a los 3,13 pesos. El dólar sigue siendo una importante moneda de refugio para el mediano y largo plazo. Ejemplo: si uno sueña con hacer un viaje en los próximos años a alguna parte del mundo, no es errado pensar en ahorrar dólares. Otra cosa distinta es si uno quiere resguardarse momentáneamente del tsunami financiero que corre por las bolsas internacionales y sale a comprar hoy dólares para venderlos dentro de unas semanas.
Ejemplo: si uno todavía no decidió cambiar su auto y necesita un par de días para definir la operación, no es aconsejable refugiarse en el dólar ya que la volatilidad que presenta el precio actual puede generar algunas pérdidas sobre ese capital.
* El euro. Hay que utilizar el mismo razonamiento que el explicado para el dólar. Sirve como ahorro para el largo plazo. Hoy en el mercado de cambios se están observando modificaciones en la cartera de monedas. Muchos de los ahorristas que tenían euros se están nuevamente dolarizando, previendo que la moneda del Viejo Continente seguirá hacia la baja. Distintos analistas del mercado estiman que los precios del euro se mantendrán hasta fin de año entre los 1,40 y 1,46 dólares por unidad. Para el 2009, ya hay operaciones con cierres
por debajo del piso mencionado. Si usted tiene planificado en los próximos años viajar al exterior y tiene ahorros en euros, no estaría mal que los nuevos ahorros sean en dólares. Diversificar la canasta de monedas disminuye los riesgos sobre las pérdidas.
* El peso. Sin ironías, nuestra moneda no deja de ser, para el corto plazo, un buen rease
guro de inversión. Las variables macro que presenta hoy el sistema financiero argentino son buenas: altas reservas en el Central, entidades que no están con pasivos atados a "garantías basura", no hay crisis hipotecaria y la economía, a pasos más lentos, continúa con cierto nivel de actividad. Cualquier operación de limitada dimensión (cambiar el auto, comparar materiales para ampliar la vivienda, adquirir un lote, etc.) que se quiera hacer en los próximos
meses se puede hacer manteniendo la posición de los ahorros en pesos. Ahora, no nos olvidemos que estamos hablando del corto plazo, esto es un horizonte preferentemente no mayor a los seis meses. No sería prudente hoy ahorrar en pesos si uno tiene planificado hacer un viaje al exterior en los próximos años.
Ahora bien, existen los inversores que están dispuestos a arriesgar algo más buscando salvar el capital que hoy tienen ahorrado. ¿Dónde invertir con
la inestabilidad que muestran las bolsas internacionales? Antes que nada hay que tener un concepto claro: los efectos de una crisis financieras sobre la economía real (la del ciudadano común) en general comienzan a sentirse entre los 30 y 90 días. Es común escuchar decir entre los economistas que los recintos bursátiles anticipan los ciclos económicos de un país.
¿Qué es lo que se debe tener en cuenta a la hora de analizar qué pasos dar para mover el
dinero que uno tiene como ahorros?
Hay varias salidas:
* Los ladrillos I. Si bien la crisis hipotecaria en los Estados Unidos puso un techo a los valores de las viviendas en la Argentina, todavía existen nichos para poder invertir. La imposibilidad en toda la Argentina de acceder a la vivienda propia en estos últimos años, producto del descalce existente entre los salarios y los precios del metro cuadrado, determinó que exista mucha gente joven insertada en el sistema que continúe deman
dando alquileres. Es por ello que hoy este tipo de inversión sigue siendo rentable. La clave debe estar puesta en la ubicación del inmueble y el tamaño del mismo. Alta demanda hay en las zonas céntricas de la ciudad sobre departamentos de un dormitorio con no más de 45 metros cuadrados. Hoy, buscando con paciencia, se encuentran unidades de este tipo de 35 a 40.000 dólares, obteniéndose un alquiler de 400 dólares por mes, lo que da un retorno superior al 12% anual en dólares. Un buen resguardo para el capital.
* Los ladrillos II. Con la finalización del boom de la construcción en todo el país, existirán buenas oportunidades para aquellos inversores que negocien colocar capital para terminar una obra que no
puede ser financiada por la empresa que la inició. Luego de la crisis de principios de semana en Wall Street, muchos inversores repatriaron sus fondos y buscan resguardo de los mismos en este tipo de inversión. El costo de oportunidad es clave para definir el negocio en estos nichos que todavía sigue generando la construcción.
* Plazos fijos. La crisis financiera en general presiona sobre las tasas de interés, ya que la gente vende sus acciones y refugia esos fondos bajo el colchón. Los plazos fijos son una opción para no perder dinero. En pesos hoy el sistema está pagando por $ 50.000 a 30 días tasas del 10 al 13% anual. Un valor que está por debajo de la inflación pero arriba de la potencial depreciación del peso frente a monedas como el dólar o el euro. El inversor tiene que tener en claro en esta operación el banco a elegir, ya que la casa matriz de muchas de las sucursales que hay en la Argentina están pasando en los Estados Unidos y Europa un muy mal momento.
* Bolsa. Para los inversores más audaces está la bolsa. No caben dudas de que hoy es el momento para salir a comprar las "gangas" luego de la debacle de los primeros días de la semana. Algunos papeles ya recuperaron posiciones entre jueves y viernes, luego del anuncio del gobierno de los Estados Unidos. Acciones ligadas al sistema financiero y alimenticias, que pierden terreno por falta de escala, están en la mira de los inversionistas. Este tipo de operaciones son riesgosas; sin embargo muchos son los operadores que aseguran que hay margen para recupero sobre determinados papeles en las bolsas del mundo. Los Fondos Comunes de Inversión (FCI) pueden ser hoy una herramienta atractiva para el pequeño y mediano inversor que quiere resguardar sus ahorros, más aún si se tienen en cuenta las pérdidas anuales que vienen registrando la bolsas en el mundo.
Todos conceptos que sólo deben ser tomados como referencia por el inversor.
JAVIER LOJO
jlojo@rionegro.com.ar