Quién sabe qué es lo que pasa con las prórrogas de las concesiones petroleras. Sapag insiste desde hace un mes por todos los medios: "La semana que viene se firma con Repsol". Pero no sólo no llega esa firma, ni siquiera hay información sobre lo que se va a acordar. El hermetismo existente sobre esta información es preocupante. ¿Qué es lo que no se puede mostrar? ¿Qué es lo que no quieren dar a conocer? ¿No suena extraño que una sola persona cierre el futuro de la provincia con las empresas petroleras? No son pocos los que ya señalaron que este tipo de actitud es proclive a generar nichos de corrupción que son difíciles de investigar. El antecedente de la prórroga de Loma de la Lata dejó esa impresión. Habría que preguntarse quien estuvo atrás de esa operación en aquel momento.