La presidenta Cristina Fernández de Kirchner defendió la política de retenciones y especialmente al polémico Guillermo Moreno, secretario de Comercio Interior. Esa postura cayó muy mal entre los hombres de negocios. Tal es así que en la última semana hubo diversos contactos entre los popes de AEA (Asociación Empresaria Argentina) y dirigentes industriales agrupados en la UIA.
En esas conversaciones quedó en claro que la gente del establishment ya no tolera más que Moreno continúe en su cargo.
"Todo el mundo lo cuestiona, sus métodos han fracasado y encima en el gobierno quieren seguir manteniendo a una persona que complicó mucho más de lo que aportó", apuntó un importante directivo de AEA.
Y la carga contra Moreno no se hizo esperar. No fue ninguna casualidad que el presidente de Fiat, Cristiano Rattazzi, formulara advertencias sobre la evolución de los precios. Inmediatamente fue el turno de José Ignacio de Mendiguren, quien no tuvo ningún reparo en resaltar la necesidad de reformular el INDEC. "En realidad se empezó por la inflación y el INDEC, que son dos temas que maneja Moreno, pero el objetivo es continuar con el lobby para que esta persona deje ese cargo", resaltó uno de los popes de la UIA. A decir verdad, dentro de la industria hay un gran revuelo con todo esto; mientras algunos dirigentes tratan de suavizar el discurso de la inflación, desde las filiales del interior están que trinan con esa postura porque advierten que la realidad concreta es que los costos de producción aumentan día a día.
Y volvieron a sonar algunos nombres para un eventual reemplazo de Moreno. Uno de ellos, Ricardo Echegaray, titular de la ONCCA, aunque tampoco él cuenta con el visto bueno de algunos empresarios. Otro nombre es el de Beatriz Nofal, aunque se duda de que quiera tomar ese cargo en este momento. Todo indica que las presiones sobre Moreno continuarán, pero nadie sabe cuánto tiempo más podrá sostenerse en el cargo.