En el mercado financiero se reconoce ya una fuerte desaceleración en las colocaciones por efecto del descalce con los depósitos y el aumento de las expectativas inflacionarias.
Se esfumaron prácticamente las entidades que ofrecían hipotecarios a tasa fija y varias instituciones públicas reconocen que están reviendo las condiciones de sus líneas para la vivienda. También se empiezan a acortar los plazos. Los créditos de mediano plazo a tasa fija prácticamente han desaparecido del sistema financiero local y desde las entidades se reconoce una fuerte desaceleración en la colocación de líneas hipotecarias y personales.
En general, los bancos consultados coinciden en que la tasa de crecimiento de los préstamos viene decayendo. Y, en consecuencia, se disparan las tasas.
Sólo el Banco Hipotecario presta en tasa fija hasta el 2018 aunque, desde hace quince días, la ofrece del 22,75%. En general, el costo financiero total ha subido y está más cerca del 40 que del 30%. Tal es el caso del Galicia (35% de tasa nominal y 39% de CFT), el Santander (TNA mayor al 30%); el Francés (TNA: 35%) y el Hipotecario (TNA: 29%; CFT: 35%).
Tampoco la banca oficial presta a tasa fija para el consumo: según su página web, los créditos personales y familiares son a tasa fija sólo hasta los 18 meses -y a un costo nominal del 20,9%- e incluyen desde esa instancia una tasa variable del 19,9%.