La actividad turística experimentó una fuerte reactivación luego de la devaluación. Sin embargo, Daniel González Coca, presidente de la Asociación Empresaria Hotelera y Gastronómica de Neuquén, señaló, entre otros puntos, que el aumento de costos está deteriorando la competitividad del sector. El siguiente es el diálogo mantenido con “Río Negro Económico”.
–¿Cómo cerró el 2007?
–La actividad fue levemente superior al 2006. Las estadísticas de la Subsecretaría de Turismo de la provincia no pueden ser reales, se inflan los números para mostrar un buen rendimiento. Las de la municipalidad de Neuquén son más confiables y cercanas a las nuestras. El nivel de habitaciones ocupadas fue de un 75% anual y en camas, del 50%.
–¿Y en la cordillera?
–El comportamiento es distinto; tiene alta y baja temporada, cosa que en Neuquén capital no se da. A nivel de ocupación se pasa del 95/100% al 20/30%.
–¿Cómo afecta la variable inflación?
–Por más que se manipule el INDEC, los gremios saben cuál es la inflación real y tratan de lograr aumentos por encima de ella. El Ministerio de Trabajo hasta ahora no ha sido imparcial. Macroeconómicamente no vemos un cambio positivo en las reglas de juego. Sigue estando Moreno a cargo del INDEC y no creemos que las negociaciones salariales sean fáciles.
–¿De cuánto fueron los aumentos salariales en el 2007?
–Cercanos al 24%. También aumentaron los insumos, lo que obliga a subir las tarifas. Las empresas pueden disminuir un poco la rentabilidad, pero no demasiado. Si tenés desinversión es un problema a largo plazo. Debe existir una ganancia que permita la reinversión.
–¿Cómo incide la cuestión tributaria en el sector turístico?
–La Federación Hotelera y Gastronómica organizó un coloquio tributario el año pasado. Se analizó cómo impactaría una rebaja de los impuestos a favor de la actividad y del fisco inclusive, haciendo una proyección de 3 años. Las reducciones en Ingresos Brutos, IVA, cargas sociales y amortizaciones aceleradas de inversiones impactarían positivamente en la creación de empleos y la inversión. Y el mayor volumen de actividad permitiría recaudar más. Tengamos en cuenta que el sector turístico es mano de obra intensivo, las personas no pueden ser reemplazadas por máquinas.
–¿Cómo ve el 2008?
–Con los incrementos de costos ya estamos prácticamente como en el 1 a 1. El turismo emisor, ante una tarifa similar, elige viajar al exterior. La gente que viene a nuestra provincia mayormente es de Buenos Aires y tiene Ezeiza al lado. Cuenta con destinos atractivos, similares costos y no tiene problemas de piquetes y falta de nafta. Es uno de los factores por los que comienza a disminuir la cantidad de visitantes. Si bien no tenemos estadísticas del 2008, en nuestro caso, en lo que va de enero tuvimos una ocupación del 70%, cuando en otros años fue del 95 ó 100%; eso marca una tendencia preocupante.
–¿Cómo evalúa el apoyo de la provincia al sector?
–La creación de Neuquén Tur fue una herramienta muy importante. Antes no se hacía demasiada promoción. Pero se duplicó la masa de dinero destinada a Turismo, ya que siguió existiendo la subsecretaría.
–¿Cuáles son las expectativas con la administración Sapag?
–La Asociación Hotelera mantiene su preocupación por no tener representación dentro del directorio. Es muy importante que el nuevo gobierno tenga en cuenta los errores de elegir personas sin el conocimiento adecuado para integrarlo.
–¿Qué está faltando en Neuquén en materia de infraestructura?
–Es fundamental el transporte aerocomercial. Resulta positiva la decisión del gobernador de crear la cartera aeronáutica para resolver la conectividad aérea entre Neuquén y el interior de la provincia y Buenos Aires. También debería comunicar con Temuco, Bariloche, Mendoza...
–¿Y en materia de rutas terrestres?
–Hubo desinversión en los últimos años; por ejemplo, el tramo Senilllosa-Chocón está destruido. Por suerte se asfaltó la Ruta 40, es un gran avance.
–¿Qué falta en Neuquén capital para fomentar el turismo de negocios?
–Un predio ferial y un centro de convenciones. Hay ferias que no se hacen porque tienen que ir a globas; se están perdiendo unas diez ferias al año que aumentarían el turismo.
–¿Y en cuanto a estructura hotelera?
–El promedio de ocupación es del 75% anual, cuando Buenos Aires está al 90%. Creo que no es tan dramática la situación.
–¿Qué otros obstáculos enfrenta el sector?
–La inversión que hagan el sector privado y el Estado no sirve de nada con piquetes en la ruta. La Justicia tiene que empezar a trabajar. Son millones que se invierten para que luego se elijan otros destinos. Los piquetes no pueden seguir sucediendo.
PERFIL: Licenciado en sistemas
Daniel González Coca es licenciado en sistemas, tiene 41 años, está casado y tiene un hijo.
En materia de deportes practica en forma regular natación, esquí y remo.
Sus preferencias en materia de lectura son variadas. Eso sí, es un hincha casi fanático de River.