MADRID (AFP).- Los españoles con préstamo hipotecario de tasa variable, al que dedican la mitad del sueldo, no sólo están presionados por el aumento de las tasas de interés del Banco Central Europeo (BCE) sino que sufren el impacto de la actual crisis estadounidense de “subprimes”.
Los llamados “subprimes”, es decir los préstamos de alto riesgo que se conceden a los hogares menos solventes, no existen en España, ya que las condiciones para obtener un crédito son mucho más severas, pero no puede descartarse un efecto contagio.
La actual crisis de falta de liquidez en el mercado interbancario, que el BCE y la Reserva Federal estadounidense intentan paliar inyectando dinero, ha hecho subir el Euribor, la tasa de interés para los préstamos que fijan los grandes bancos europeos.
Esta tasa es el índice de referencia de las hipotecas, los préstamos inmobiliarios en los que la vivienda es la garantía. Estas sólo son frecuentes en España, en el 95% de los casos a tasa variable.
“Las familias españolas están entre las primeras en pagar lo que pasa en Estados Unidos”, declaró Fernando Herrero, vicepresidente de la Asociación de Usuarios de Bancos, Cajas de Ahorros y Seguros (Adicae).
Según los últimos datos del Banco de España, el valor total de los créditos hipotecarios se elevaba en mayo a 949.670 millones de euros, frente a 783.760 un año antes.
“En España hay cinco millones de familias que tienen un préstamo hipotecario”, según Herrero.
En sólo 15 días, entre el 31 de julio y el 15 de agosto, el Euribor subió un 0,35% y se situó en el 4,60%, una fuerte alza, según el diario ABC. Si se mantiene esta tasa, representaría un coste adicional de 74 euros al mes para una vivienda hipotecada a 150.000 euros a 15 años con revisión anual, calcula el diario.
Pero las familias españolas con préstamo ya sufrían una fuerte presión debido a la subida de tasas de interés del BCE y el incremento de precios del sector inmobiliario.
El efecto negativo en el Euribor “se añade a los efectos del alza de tasas de interés decididas por el BCE”, estima Herrero.
Según el Banco de España, el endeudamiento en España era en mayo de 819.330 millones, con una subida del 16,8% frente al año anterior. De esta suma, más de 603.000 millones se destinan a la vivienda, con un incremento del 17,1%. Este endeudamiento preocupa a muchos observadores, sobre todo a la OCDE.
Pero la situación no es extrema, según José Villacis, profesor de Economía de la Universidad San Pablo CEU. “Es posible que haya un riesgo, pero marginal”, declaró. “Los españoles han tomado riesgos muy calculados”, estima, y “su mentalidad económica está preparada para lo peor. Han integrado el hecho de que más de la mitad de sus ingresos van directamente al pago de los préstamos” por vivienda. Mientras, en Francia, lo que se destina al pago del crédito no puede ser más de un tercio del sueldo.
La Adicae es más pesimista y cree que si la tasa de la BCE subiera un punto, 50.000 familias no podrían pagar la hipoteca y 150.000 no podrían hacerlo con un aumento de dos puntos. Pero si los españoles destinan cada vez más sueldo al pago de la hipoteca, deberán reducir su consumo, que por su parte es el mayor motor de crecimiento del país (cerca del 4% anual).
LA CASA ESTA EN JUEGO
“De uno a tres millones de personas podrían perder su vivienda” en Estados Unidos, por la disparada de las cuotas de sus préstamos hipotecarios a tasa variable, declaró el senador Christopher Dodd.
“A causa de ciertos tipos de créditos acordados entre el 2004 y el 2006, la variación (de las tasas de interés, ndlr) puede hacer pasar las cuotas de 400 dólares a más de 1.500 dólares para quienes tomaron los típicos préstamos hipotecarios a riesgo, que ofrecían bajas tasas de interés al principio”, agregó el senador de Connecticut (noreste).
Dodd formuló sus declaraciones al término de una reunión con el presidente de la Reserva Federal Ben Bernanke y con el secretario del Tesoro Henry Paulson. “Estamos en el nivel más alto de embargos de viviendas en 37 años y en el nivel más bajo en 10 años en la iniciación de construcción de viviendas, por lo que solicito al gobierno que sin demora haga lo necesario para que la gente pueda conservar su vivienda”, dijo el congresista demócrata y precandidato a la elección presidencial del 2008.