BUENOS AIRES.- Aunque en la Argentina se estimó, recientemente, que viven 8,5 millones de perros y entre 3,5 y 4 millones de gatos, en la Cámara Argentina de la Industria de Productos Veterinarios (Caprove) calcularon 8 y 3 millones respectivamente. Además, habría 3,5 millones de pájaros (en su mayoría canarios y loros), peces, tortugas, conejos, hámsters y otros animales no tan tradicionales. Esto ocurre porque vivir con un animal de compañía puede mejorar la calidad de vida, ya que brinda, sobre todo, bienestar mental y social, como demostraron estudios científicos. Por otra parte, la zooterapia, generalmente con perros y caballos, permite que cada persona tratada en opinión de especialistas logre una mayor comunicación y aceptación propia.

Según la consultora LatinPanel, de los 10,5 millones de hogares del país, el 70% (7,35 millones) tenía mascotas y en el interior, un 6% más que en la Capital Federal y el Gran Buenos Aires, situación más acentuada en las ciudades pequeñas que en las grandes. En el área metropolitana gastaban en ellas, en promedio, un 30% más que en el interior. En el nivel socioeconómico alto había menos y 9 de cada 10 hogares elegía la opción de "pet foods" (alimentos balanceados), proporción que descendía al 55% en los de ingresos más bajos.

Las ventas de los llamados zooterápicos se incrementaron el año pasado en relación con el 2005, en volumen, el 10% y en facturación, el 8% (casi tres veces más habrían alcanzado firmas que lanzaron nuevos productos o por sus estrategias de marketing). Los precios aumentaron paulatinamente como consecuencia de la inflación o competencia. Los antiparasitarios siguieron siendo los más demandados, sobre todo y últimamente las pipetas "Frontline plus", de Merial, para pulgas y garrapatas. Acerca de los antibióticos, fundamentalmente los biológicos, la industria procuró que los profesionales extendieran mayor cantidad de recetas, incluso de genéricos. Las vacunas siempre ayudan a disminuir la severidad de las enfermedades futuras y en oportunidades evitan las infecciones.

Lamentablemente, se incrementaron los canales no convencionales e ilegales, provocando una competencia desleal para los profesionales, atribuida a compañías o distribuidoras que los saltearon en la comercialización y no consideraron lo nocivo y arriesgado de usar productos no aprobados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

La Cámara Argentina de Fabricantes de Alimentos Balanceados (CAFAB) destacó la recuperación de los niveles anteriores a la crisis posdevaluación 179.400 toneladas anuales y retomó su crecimiento. LatinPanel y empresas del sector calcularon para este año alrededor de 330.000 toneladas, que movilizarán 1.030 millones de pesos. En la Argentina cubren las necesidades del 25 al 30% de los perros y del 40% de los gatos; en Europa alcanzan al 70% de los animales y en los Estados Unidos, al 90%.

Existen diversas marcas, presentaciones y costos. Se dice que cuanto más baratos son menos valor nutricional contienen, por lo que los animales deben comer más para cubrir sus necesidades de proteínas.

Los de calidad se elaboran con exhaustivos controles de los ingredientes para evitar aquellas sustancias no deseadas. Para compararlos recomiendan calcular el costo de las raciones diarias y el rendimiento. Hay productos "premium" para animales pequeños, medianos, grandes y hasta gigantes y para perros diabéticos, obesos, cardíacos y alérgicos.

En tiempos de globalización, media docena de multinacionales importó, desarrolló cierto volumen de producción y hasta compró alguna firma local. La norteamericana Ralston Purina, fundada en 1894, se retiró de aquí a fines de los '70 y retornó en 1992 como distribuidora, para seguidamente recomprar una planta en Santo Tomé (Santa Fe) y en el 2001 fusionarse con Nestlé Argentina, filial de la multinacional suiza, dando lugar a Nestlé Purina Pet Care.

Las principales marcas importadas disminuyeron su participación en el 2001, situación que comenzaron a revertir tres años después. Entre las principales internacionales actuantes, se encuentran:

" Nestlé Purina, con presencia en todos los canales de venta y segmentos, con las marcas ProPlan, Excellent, Dog Chow, Cat Chow, Dogui y Gati.

" La norteamericana Procter & Gamble, con Iams y Eukanuba. Trasladó su planta de Holanda a la Argentina en el 2000, para abastecer desde aquí a los mercados europeo y latinoamericano.

" La francesa Royal Canin, que compró Lawler para reforzar su posición.

" Masterfoods (Pedigree y el enlatado para gatos Whiskas).

Mientras tanto, creció la participación de las nacionales Molinos Chacabuco, Alimentos Pilar, luego adquirida en un 80% por la norteamericana Heinz; Nature Brascorp Metrive, Agroindustrias Baires y Sagemüller, entre otras. Captan del 40 al 45% del mercado total.

No faltan fábricas que elaboran para los híper y supermercados Carrefour y Libertad y las tiendas de descuento Eaky y Día.

LatinPanel señaló que el canal de distribución líder es el de las forrajerías y almacenes, con el 45,1% del volumen total de las ventas, donde también pueden conseguirse sueltos por peso, seguidos por las veterinarias, 27,8%; súper e hipermercados donde ocupan amplios espacios en las góndolas, 13,2%; autoservicios, 9,7% y mayoristas, 4,2%.

Chile, Brasil, Uruguay y México están entre los principales países compradores de balanceados fabricados localmente, valorados por la calidad de los cereales y los preparados cárnicos incorporados.

Las golosinas (tiras de mondongo e hígado deshidratados, trenzas de pene y de esófago de novillos y orejas de cerdo) se destinan a un mercado de medio y alto poder adquisitivo. Transuniversal las exporta a la Comunidad Económica Europea, Estados Unidos y Canadá.

Se observó una creciente oferta de huesos artificiales, indumentaria hasta pilotos transparentes para la lluvia que combinan con sandalias de su dueña, camperas de cuero, cinturón y hebilla y camisetas de los principales clubes de fútbol, productos de limpieza y cosméticos. Aumentó la demanda de accesorios en la ciudad de Buenos Aires es obligatorio llevar a los perros con correa y collar y proliferaron los modelos de "cuchas" y "moisés", sets para comer, bolsos de transporte, camas y juguetes (tortas de cumpleaños y pizzas en látex para perros y ratones a fricción para gatos). Antes sólo se vendían en las veterinarias o súper e hipermercados y ahora existen "pet shops" que se dedican exclusivamente a vender esos artículos.

Firmas locales dedicadas a la moda siguen con sus creaciones y, en la medida de sus posibilidades, las tendencias de Estados Unidos, pero aún no organizan "show rooms" para que los perros puedan probarse hasta smokings y vestidos de novia con diseños originales, calidad, resistencia y durabilidad. Esto sin olvidar los complementos para otras mascotas, como acuarios y peceras o las jaulas con dispensadores de alimentos para pájaros. Varias firmas los exportan a Brasil, Francia y Alemania, por citar algunos destinos, y Mister Hueso, por ejemplo, terminó de participar de una reciente misión comercial multisectorial bonaerense a Japón y Corea del Sur.

Abundan las recomendaciones para tener cuidado con los adiestradores y los "paseadores" o cuidadores de perros (aquí deben ser mayores de 18 años). Otro tanto para las guarderías o los pensionados, en donde por distintas circunstancias mayormente las vacaciones alojan sobre todo a perros, para que no sean mal atendidos ni carezcan de atención veterinaria.

Desde hace un par de años se promocionan "spa caninos" o "resorts", donde les brindan libertad y comodidad, como si estuvieran en el campo. Hasta hay una "hostería profesional para animales" Las Palmas, en Garín (Buenos Aires), que da alojamiento, servicios veterinarios, entrenamiento de mascotas para la televisión y asistencia a personas con discapacidades.

Los cementerios de mascotas funcionan desde hace años (en el área metropolitana quedaron dos, en Berazategui y Olivos) y surgieron porque mucha gente no disponía de lugares propios para enterrarlas. Ni siquiera faltan recordatorios en los cementerios virtuales de internet.

PERROS, GATOS Y LAS NO TAN TRADICIONALES

Según un informe de LatinPanel, en el 70% de los hogares argentinos hay algún tipo de mascota.

Todo lo que ofrece una clínica veterinaria

BUENOS AIRES.- En la Argentina, apenas cerca del 20% de los dueños de perros y gatos consulta anualmente a profesionales de manera preventiva o por alguna urgencia, según la Caprove.

"El desarrollo y la aplicación de habilidades empresarias no constituyen normalmente asuntos a los que se preste suficiente atención en la agenda de trabajo del médico veterinario ni en los programas académicos y de actualización habituales", observó la consultora en mercadotecnia veterinaria DVM, de México. Y, aunque la combinación adecuada de excelencia médica y calidad en la atención resultan esenciales para establecer un vínculo profesional sólido y de confianza con el cliente, el aprendizaje de tales habilidades por los médicos veterinarios resulta imprescindible para el óptimo aprovechamiento de un mercado con un potencial tan significativo.

Los profesionales evalúan, básicamente, las necesidades específicas de cada mascota y seleccionan los programas de cuidados anuales (vacunaciones y tratamientos) y de alimentación, aparte de atenderlas por accidentes e intervenciones quirúrgicas y en el caso de internaciones. Ellos deben recomendar las dietas de acuerdo con la edad, tamaño, salud, temperamento, actividad y medio ambiente del animal doméstico.

En determinados "pet shops" (negocios donde se venden artículos para mascotas) no sólo ofrecen servicios de baño, secado y cepillado y de peluquería sino también los de "grooming", o sea los de "belleza", con cosméticos y corte de uñas. Otros organizan cumpleaños, donde no faltan las sorpresas, el cotillón y las golosinas. En "Mi fiel amigo", de Monte Grande (Buenos Aires), publicitan los avisos "Busco pareja", con datos y fotos.

Hasta que las circunstancias así lo exigen, la gente no siempre conoce todo lo que puede llegar a ofrecer una clínica veterinaria.

En Bariloche, por ejemplo, María Graciela Beveraggi, Pilar Colombo y Roberto Radaelli, profesionales con capacitación y actualización continua, ex docentes de la Universidad de Buenos Aires, se dedican desde hace más de 25 años exclusivamente a la atención de los pequeños animales de compañía. En Foyel (nombre de un árbol sagrado para los mapuches) proporcionan los siguientes servicios:

" Clínica, con el objetivo de buscar el diagnóstico preciso y su más adecuado tratamiento.

" Oftalmología.

" Control odontológico y limpieza dental.

" Laboratorio, con tecnología de última generación.

" Cirugía.

" Radiología, para estudios simples y/o contrastados de alta resolución.

" Ecografía, aplicable al diagnóstico de enfermedades obstétricas, ginecológicas, mamarias, renales, hepáticas, cardíacas y andrológicas.

" Computación. Se dispone de las últimas versiones de programas para llevar un detallado historial clínico de los pacientes, con fechas exactas de tratamientos, vacunas, análisis, vacunación y desparasitación, que envían a los clientes periódicamente para ayudarlos a cumplir con todos los cuidados necesarios. Incluye una base de datos de reproductores de raza para consultar en forma permanente y un programa que formula la dieta adecuada a cada etapa.

" Servicio de educación para el consumidor, con cartillas de interés general sobre diversos temas como salud, cuidados, alimentación, enfermedades y planes de vacunación, que se entregan a los clientes.

" Baños y peluquería, para que las mascotas se vean siempre limpias y saludables y prevenir problemas de piel utilizando champúes especiales, antisépticos, antiseborreicos, antiparasitarios y resaltadores de colores. Hacen esquilados y cortes de raza.

" "Vet-express", una unidad móvil para la atención de pacientes y su eventual traslado a la clínica o el envío a domicilio de fármacos y alimentos balanceados.

" Internación, con cuidados intensivos y específicos durante el tiempo necesario hasta la total recuperación del animal.

" Productos, desde alimentos balanceados nacionales e importados hasta especialidades farmacéuticas de todo tipo y variados accesorios.

" Página web y boletín electrónico mensual, para mantener informados y actualizados a los dueños, presentar los servicios y recomendar productos.

Caprove, al servicio de la sanidad animal

BUENOS AIRES.- Con más de seis décadas al servicio de la sanidad animal y la producción pecuaria, en la Cámara Argentina de la Industria de Productos Veterinarios (Caprove) recomiendan tener en cuenta los siguientes aspectos relacionados con los animales de compañía o mascotas.

" Ubicarlos en su función social y considerar el impacto que las zoonosis representan en la convivencia diaria.

" Desarrollar no sólo avances en los cuidados médicos y alimentarios sino también en los mecanismos identificatorios que aseguren su pertenencia y la responsabilidad de cuidado y manejo del dueño frente a terceros y la sociedad en su conjunto.

" La responsabilidad de tenencia que, sobre todo en las ciudades, está representada por la atención al animal en materia de alimentación y salud y, asimismo, el cuidado de la salud pública y el medio ambiente en todos sus aspectos.

Caprove formó la "Comisión animales de compañía", con socios que trabajan en ese segmento, a fin de establecer canales de diálogo con entidades vinculadas con el sector y conocer sus necesidades y demandas e intercambiar opiniones. Procura, por otra parte, crear conciencia acerca de la importancia de la prevención sanitaria en las mascotas y que se incrementen las consultas a los veterinarios.

Todo eso se complementa con el fomento del uso responsable de productos veterinarios, que cuenten con el correspondiente control de calidad y sean elaborados por laboratorios que se adapten a las normas de "Buenas prácticas de fabricación de productos veterinarios" (GMP) y comercializados y distribuidos a través de canales legalmente habilitados.

La entidad nuclea a 30 empresas, 22 nacionales y ocho extranjeras, con más de 2.000 empleos directos y 30.000 indirectos. Elaboran, comercializan e importan 2.000 especialidades biológicas y farmacéuticas para todo tipo de especies y en el 2005 facturaron 400 millones de pesos y superaron los 50 millones de dólares en exportaciones. Incentiva entre sus asociados la aplicación de normas de GMP, que considera fundamentales, precisamente, para la proyección de la industria hacia el exterior. A su vez, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) las implementó en mayo del 2002.

Oscar Argento, presidente de Caprove, explicó que continúan trabajando para fomentar todo el sector no sólo el orientado hacia las mascotas con capacidad de desarrollo y elaboración de productos de calidad internacional para asegurar la salud animal del país. Por eso consideró clave la transferencia tecnológica al productor y la educación sanitaria a través de las acciones conjuntas privadas y públicas, siempre con los profesionales veterinarios.

La entidad trata, por otro lado, de erradicar la competencia desleal, promoviendo el respeto al registro de patentes de los medicamentos formulados y exigiendo la correcta inspección y habilitación comercial de aquellos establecimientos que elaboran los insumos.