BRASILIA (AP).- El fortalecimiento de la moneda brasileña frente al dólar estadounidense acarreará "la muerte'' de algunas compañías, pero eso es "natural'' y Brasil debe acostumbrarse a una moneda fuerte, dijeron altos funcionarios.
El ministro de Comercio Exterior, Miguel Jorge, descartó que las exportaciones brasileñas caigan por ese repunte del real o que se produzcan despidos de trabajadores debido a un aumento de las importaciones, afectando con ello la producción local.
Jorge no dio detalles sobre qué empresas eran las más vulnerables, pero indicó que su despacho ya atendía compañías como las del sector de textiles, calzado y muebles, que solicitan principalmente elevar tarifas de importación al 35%, el máximo que permite la Organización Mundial de Comercio (OMC), y agilizar el desembolso de financiamiento por parte del Banco Nacional de Desarrollo. Agregó que el Ministerio de Hacienda podría aplicar excepciones tributarias. Dijo que ese posible cierre de empresas "era natural'' porque Brasil debía acostumbrarse a tener compañías eficientes y competitivas que hicieran inversiones en tecnología y tuvieran una buena administración.
Las políticas que viene aplicando el Ministerio de Comercio Exterior "son positivas, pero no suficientes'', dijo a su turno Paulo Skaf, presidente de la poderosa Federación de Industrias de Sao Paulo, llamando a que el gobierno imponga medidas de protección a productores locales frente a la competencia de China. El real fuerte "es una señal de nuestra prosperidad'', dijo el ministro de Hacienda, Guido Mantega.