El hijo menor del líder norcoreano Kim Jong-il ha estado durante meses en el centro de las especulaciones sobre quién sería el sucesor del mandatario del país comunista. Kim Jong-un, cuya edad se calcula en torno a los 28 años, ha sido considerado durante mucho tiempo como el favorito, aunque se sabe muy poco de él.
Los debates sobre las relaciones de la familia de Kim Jong-il son un tema tabú en Corea del Norte, por lo que las fotografías que exigen del más joven de los Kim son escasas. La primera mención de su persona en los medios estatales norcoreanos se realizó esta semana durante el anuncio de que su padre lo había ascendido a general de cuatro estrellas.
Pese al secretismo, el que fuera cocinero de Kim Jong-il, Kenji Fujimori, escribió en un libro que el tercero de los hijos del mandatario es el más parecido al padre, tanto en apariencia física como en carácter.
Al parecer desarrolló un temprano sentido de la autoridad y el poder, escribe el diario surcoreano "The Korea Herald". Se dice que padece de diabetes, igual que su padre.
Y parece un hecho consumado que se convertiría en el príncipe heredero del aislado y empobrecido Estado comunista.
El anuncio de su nombramiento como general fue otra indicación de que pronto podría ser nombrado sucesor de su padre. Ocurrió poco antes del mayor encuentro en 30 años del partido comunista, el Partido de los Trabajadores de Corea. Allí Jong-un también fue nombrado miembro del Comité Central del partido.
El nuevo puesto concebido para el aparente heredero lo coloca justo bajo su padre y sobre cualquier otro jerarca en este ejército que cuenta con 1,2 millones de militares. Es la institución más poderosa, con mejores recursos y omnipresente en todas las áreas vitales del país.
"Ahora el príncipe heredero tiene todo lo que necesita para ser el próximo líder", dijo Choi Jin-wook, un analista del Instituto Coreano para la Unificación Nacional. Durante el congreso anterior, en 1980, Kim Jong-il fue nombrado heredero político de su padre, y llegó al poder en 1994, a la muerte de Kim Il-sung.
La de esta semana fue la primera noticia concreta de que Kim Jong-un está ascendiendo la escalera política de la enigmática Corea del Norte.
El joven emergió el año pasado como el probable sucesor. Desde entonces, noticias filtradas señalaron que los funcionarios le juraron lealtad, mientras se escribieron poesías y canciones propagandísticas sobre su persona, y su cumpleaños fue declarado día festivo nacional.
Kim Jong-un nació en 1983 ó 1984, hijo de una bailarina y tercera mujer de Kim Jong- il, Ko Yong-hi, que murió hace seis años de cáncer.
Al parecer, su hijo fue educado bajo un nombre falso en una escuela internacional de Berna, en Suiza, hasta 1998. Abandonó la escuela a los 15 años sin haber completado sus estudios. Sus compañeros de clase lo describían como tímido e introvertido, añadiendo que le gustaba esquiar y jugar al baloncesto. Admiraba a Michael Jordan y al actor Jean-Claude Van Damme, según la revista.
Los analistas mencionaron, asimismo, la importancia del nombramiento de Kim Kyong-hui, la hermana de 54 años del líder norcoreano, también al cargo de general de cuatro estrellas. Está casada con Jang Song-thaek, a quienes los analistas consideran el líder número dos del país.
Los dos están ahora en posiciones que les permitirían actuar como mentores de Kim Jong-un, quien, al contrario de su padre, no tendrá probablemente dos décadas para prepararse para la sucesión. Según la inteligencia surcoreana, Kim Jong-il sufrió un infarto cerebral en el 2008, lo que ha dado pie a numerosas especulaciones sobre su estado de salud. Si falleciera pronto, Jang podría ser el encargado de ocupar el cargo temporalmente, hasta que Kim Jong-un estuviera listo para extender la dinastía de los Kim.
Aunque algunos analistas dicen que podría haber algunas peleas internas sobre la sucesión dinástica, un golpe de Estado o sublevación importante es improbable, "porque la elite piensa que ella y los Kim están en el mismo barco", señalan.
DIRK GODDER
DPA