El líder de Libres del Sur, Humberto Tumini, sostuvo que después de la derrota en el conflicto con el campo el gobierno nacional tiene que "profundizar la redistribución" de la riqueza para obtener "el respaldo social que le permita salir de la defensiva y retomar la iniciativa".
Tumini rechazó la posibilidad de que el gobierno de Cristina Kirchner pegue un giro hacia la derecha, pero expresó sus dudas respecto de la voluntad oficial para profundizar el modelo en las actuales circunstancias. La que sigue es la entrevista mantenida por este diario con el dirigente kirchnerista a su paso por Neuquén.
-¿No cree que el gobierno se equivocó gravemente en el conflicto del campo?
-Tuvo dos caras. Una valorable, que fue afectar una parte de la renta extraordinaria del campo para poder hacer un país mejor y para tratar de desvincular los precios internacionales de los internos y sostenerlos con firmeza. Después hubo errores previos y en el desarrollo del conflicto. El principal entre los previos fue una mala valorización del adversario al que iban a enfrentar y, por lo tanto, una mala estrategia. No se preparó a la sociedad para la confrontación, no se le explicó lo que estaba en juego, no se la convocó para defender esa medida y no se dividió el frente opositor, siendo que era totalmente posible hacerlo dado que no son lo mismo los pequeños productores que la Sociedad Rural y los pooles de siembra. También creo que se debió haber recurrido al Congreso antes, en vez de esperar que el conflicto tomara semejante dimensión y que el frente opositor alcanzara la envergadura que alcanzó, particularmente con el acto de Rosario.
-¿Usted cree que falló la política comunicacional del gobierno?
-Totalmente. Ésa es una deficiencia que arrastramos desde hace tiempo. No obstante, algunas políticas el gobierno no las comunicó mal; al contrario, durante cuatro o cinco años parte de su acción la comunicó bien: en el terreno de los derechos humanos, de la alianza latinoamericana, en reivindicar el papel del Estado, en disminuir la pobreza, en que haya más producción y no especulación. Lo que pasa es que en un determinado momento hacía falta una política comunicacional propia mucho más vigorosa y el gobierno, en su lugar, confió en que algunos grandes multimedios como Clarín iban a ser aliados de su política. En realidad, cuando se afectaron intereses más profundos de los sectores dominantes esos multimedios ju
garon en contra.
-Al final el gobierno se quedó solo en el Senado. En su opinión, ¿qué reveló sobre su política de alianzas la crisis del campo?
-Que no era idónea para el proyecto nacional que lleva adelante el gobierno. La asunción de Kirchner como presidente del justicialismo fue la manifestación de un error político significativo, porque automáticamente se estrechó el marco de alianzas y de consensos de su proyecto nacional. El PJ es un partido muy complejo y una parte importante de su dirigencia tiene vínculos con los sectores más concentrados económicamente a los que había que afectar con un proyecto nacional. Cuando Kirchner se puso como presidente del PJ, mostró en negro sobre blanco su debilidad y terminamos perdiendo la votación en el Senado por Cobos, efectivamente, pero mucho antes por la defección de los legisladores del justicialismo.
-¿Qué opina de que Kirchner haya dejado de lado su proyecto de partido transversal y asumido la presidencia del PJ?
-Creo que a Kirchner le faltó coraje político, porque cuando derrotamos a Duhalde en las elecciones del 2005 ése era el momento para plasmar la transversalidad, un gran agrupamiento político que no tuviera al justicialismo como columna vertebral sino a otros componentes. En ese momento, en lugar de ir en esa dirección, que es lo que él había dicho en un principio, tomó la orientación de recuperar una parte del PJ que acababa de ser derrotado y secundarizar el protagonismo y la participación de los sectores no justicialistas o peronistas que no estaban en el PJ y que habían jugado un papel protagónico en la resistencia al neoliberalismo y en los primeros años de gobierno.
-¿Tiene posibilidades de salir adelante el gobierno nacional? ¿Cómo, profundizando el rumbo o con un giro a la derecha?
-Creo que el gobierno no visualiza posibilidades de profundizarlo y tampoco va a hacer un giro a la derecha, hacer lo que hizo Frondizi o lo que hizo Alfonsín en su última etapa. Me parece que están intentando salir de la defensiva y recuperar protagonismo hasta encontrar mejores condiciones. Pueden hacer algunas concesiones a la presión de la derecha y de los gobernadores peronistas, pero no creo que ninguna de ellas signifique apartarse del proyecto que han alentado todos estos años. Lo que no sé es si eso es viable.
Duhalde y sus posibilidades
El dirigente kirchnerista Humberto Tumini cree que el duhaldismo tiene más posibilidades de aglutinar una fuerza de centroderecha que el sector que lidera el jefe de Gobierno de Buenos Aires Mauricio Macri.
-¿En el poskirchnerismo va a surgir una fuerza de centroderecha o volverá la derecha peronista?
-Los sectores dominantes opositores al proyecto nacional son relativamente heterogéneos; los más tradicionales preferirían tener a un Macri en alianza con la derecha peronista pero con él a la cabeza, es decir, tener un nuevo partido conservador en la Argentina. Otros sectores, los que están más vinculados con el duhaldismo, preferirían tener una opción política con una parte del PJ y una parte de la UCR, con un candidato a presidente tipo Das Neves, por ejemplo, y una alianza donde el neoliberalismo sea de segundo orden. Si me preguntan cuál tiene más posibilidades en caso de que logren predominar, cosa que está por verse, creo que en este contexto económico internacional y local, los segundos. El otro sector involuciona hacia los años '90, lo cual en esta sociedad es muy difícil. De todos modos, el final está abierto.
HÉCTOR MAURIÑO
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