El arte de gobernar consiste en organizar la idolatría.
" La democracia sustituye a los nombrados por la minoría de corrompidos con los elegidos por la mayoría de incompetentes.
" El precio que pagamos por la conveniencia del trono es el servilismo que propaga.
" La idea moderna de que la democracia significa gobernar un país con arreglo a la ignorancia de sus mayorías nunca es más desastrosa que cuando hay que tratar algún problema de moral sexual.
" Las revoluciones no han aliviado nunca la carga de tiranía; no han hecho más que pasarla de unos hombros a otros.
" Quien confunde la libertad política con la libertad y la igualdad política con la semejanza no ha pensado nunca cinco minutos en ninguna de las dos cosas.
" El político que en otro tiempo tenía que aprender a adular a los reyes tiene que aprender ahora a fascinar, divertir, engatusar, engañar, asustar o llamar de alguna manera la atención del cuerpo electoral.
" La monarquía limitada es un artificio para combinar la inercia de un ídolo de madera con la credulidad del de carne y hueso.
" Los reyes no nacen: los hace la alucinación artificial. Cuando el proceso lo interrumpe la adversidad en una sociedad crítica, como el caso de Carlos II, el súbdito recobra la razón, pero jamás vuelve a recobrar su propia majestad.
" A las repúblicas democráticas les son tan necesarios los ídolos nacionales como a las monarquías los funcionarios públicos.
" El revolucionario es uno que quiere abolir el orden social existente y ensayar otro.
" El salvaje se inclina ante los ídolos de madera y de piedra; el hombre civilizado, ante los de carne y hueso.
" Cuando el ídolo de madera no responde a la oración del campesino, el campesino lo golpea; cuando el ídolo de carne y hueso no satisface al hombre civilizado, el hombre civilizado lo degüella.
" Quien mata a un rey y quien muere por él son igualmente idólatras.
" El exceso de insularidad hace del británico un imperialista. El exceso en afirmar el espíritu local hace del colonizador un imperialista.
" Si los menos inteligentes pudieran medir a los más inteligentes, como una cinta métrica puede medir una pirámide, el sufragio universal tendría una finalidad. Tal como son las cosas, el problema político sigue siendo insoluble.