A grandes rasgos, se puede decir que Martín Farizano es intendente porque lo votaron 2.500 mujeres más que a José Brillo, elegido sin embargo por los hombres, con una diferencia menor: apenas 175 votos más que su adversario.
En tren de caracterizaciones generales, se puede señalar que el centro y barrios como Alta Barda, Copol y Santa Genoveva le dieron una diferencia porcentual mayor al candidato de la Alianza Frente para la Victoria, mientras que el del Movimiento Popular Neuquino obtuvo una diferencia magra en sectores populares tradicionalmente identificados con el partido provincial. Es decir: Farizano logró prácticamente un empate en barrios del oeste, lejano y cercano.
La diferencia fue de apenas 2.500 votos a favor de Farizano 52.543 frente a 51.190, según el escrutinio provisorio que comprende el 99,6% de las mesas (495 sobre un total de 497), equivalente a 122.160 electores. La polarización barrió con el resto de los candidatos, de ocho partidos que apenas sumaron 4.779 sufragios. Los votos en blanco sumaron 9.000 y los nulos, 3.000.
Otro aspecto destacado del resultado electoral es el funcionamiento de las denominadas "colectoras" de votos. Se trata de partidos que llevaron lista propia de concejales, encabezada por el mismo candidato a intendente. Esta facultad se desprende de la ley electoral provincial, cuya hipérbole significa la aplicación de la ley de lemas, y se traduce en una infinita cantidad de listas que apoyan a un candidato, con infinito fastidio para los ciudadanos que ingresan a un cuarto oscuro con cientos de boletas.
El 28 de octubre pasado,
Farizano tuvo siete listas que sumaron a su candidatura, frente a cinco de Brillo. Y la cantidad incluyó también un abanico ideológico, desde izquierda, centro y centroderecha, que en cierto modo es un mérito de los arquitectos políticos del sector. El resultado electoral está a la vista; el de gestión es la duda y desafío inmediato para los dirigentes que construyeron esta opción electoral.
Brillo hizo una gran elección; incluso superó en más de mil votos los resultados de la fórmula provincial del MPN del pasado 3 de junio. De las cinco colectoras, el MPN concentró más del 70% de los votos y fue de lejos el partido más votado (37.000 votos, seguido por 14.000 de Une-PS).
No obstante, este buen desempeño electoral no le garantizó el triunfo al partido provincial. La oposición ha probado que las alianzas electorales son eficaces en términos de resultados, situación que tiende a suprimir la hegemonía partidaria. En el futuro es impensable que el MPN vaya a compulsas electorales sin una política de alianzas: sería como una ruleta rusa, y en política no abundan los suicidas.
¿EMPATE?
El resultado de la elección de intendente de Neuquén fue tan estrecho del orden de los 2.500 votos sobre más de 122.000 electores, que los estadísticos califican la diferencia de "empate técnico". Éste no es posible cuando se dirimen cuestiones de poder, y por ello Farizano se consagró intendente por la Alianza Frente para la Victoria, relegando de tal modo a José Brillo, candidato del MPN.
Este informe tiene el propósito de explicar ciertas particularidades de la elección del 28 de octubre para intendente de la mayor ciudad de la Patagonia, y uno de los aspectos centrales consistió en evaluar el comportamiento electoral según el lugar de
residencia de los votantes.
BARRIOS E IDENTIDAD
En cierto modo, este aspecto conlleva condiciones de identidad social que están implícitas por el barrio de pertenencia; por ejemplo, Alta Barda, Copol y el centro no presentan la misma caracterización que San Lorenzo
Norte, Gran Neuquén Norte y Sur o Hibepa. Y las preferencias electorales fueron diferentes, siempre en un marco de paridad.
Se ha agrupado a los barrios en áreas según la proximidad geográfica, a excepción de tres casos que fueron apartados del resto dadas ciertas condiciones singulares (Parque Industrial, Santa Genoveva y Valentina Sur).
Las escuelas, convertidas en centros electorales, fueron el punto de referencia para establecer las asociaciones.
El informe diseñó once áreas según el criterio de proximidad. Cinco de éstas reúnen el 62% de los electores de la capital, de acuerdo con el siguiente orden cuantitativo: Centro (16%), Oeste cercano (14,6%), Oeste lejano (13,5%), Intermedios (11,6%) y Sureños del oeste (6,7%).
DIFERENCIAS
En el centro, Farizano obtuvo una diferencia de 1.562 votos (6,5%) sobre Brillo, en un total de 19.391 electores. En Las Bardas la diferencia fue del 9%, que sumó 397 votos en 3.871 sufragios. En Santa Genoveva, el candidato del FpV logró una diferencia del 10%, inusual para una contienda tan pareja, que le sumó 334 votos. A la vez, Farizano ganó por 424 votos (1,99%) en el Oeste cercano, sobre un universo de 17.952 ciudadanos que allí votaron.
Brillo obtuvo ventaja en el Oeste lejano: 239 votos (1,2%) sobre un total de 16.629 ciudadanos. En Parque Industrial sumó 69 sufragios de diferencia y 61 en Valentina Sur, lo que representa una diferencia del orden del 3%. En el área de Sureños del oeste, el candidato emepenista logró 244 votos más que su adversario (2,5%), sobre un total de 8.280 electores.
En síntesis: de las once áreas diseñadas para el informe, Farizano ganó en ocho y Brillo, en tres. En las once mesas de extranjeros un total de 1.780 votos Farizano obtuvo una diferencia del 11%, equivalente a 203 votos.
COLECTORAS EN CINCO ÁREAS
Farizano tuvo como principal aliado electoral al Une-PS, que le aportó el 22% de los votos que obtuvo en el centro, el 28% en el Oeste cercano, el 29% en el Oeste lejano y el 26% en el área de barrios Intermedios y en barrios Sureños del oeste. En segundo lugar se ubicó su propia fuerza, el FpV, con el 19% de los votos en el centro, el 19,5% en Oeste cercano, el 21% en Oeste lejano e Intermedios y el 20% en Sureños del oeste. Recrear le aportó el 17% de los votos en el centro, el 11% en Oeste cercano, el 10% en Oeste lejano y el 12% en Intermedios y en Sureños del oeste. El MID sumó el 13% en el centro, el 14% en Oeste cercano, el 12,5% en Oeste lejano y el 14% en Intermedios y el Sureños del Oeste. El ARI engrosó el activo electoral de Farizano con el 13% en el centro, el 6% en el Oeste cercano e igual porcentaje en el Lejano, el 9% en Intermedios y el 6% en Sureños del oeste. Alternativa sumó del 11 al 14% en las cinco áreas consideradas y el Frente y la Participación Neuquina aportó del 5 al 8% en dichas circunscripciones.
Brillo recibió de la colectora principal, el MPN, el 74% de los votos en el centro, el 73,5% en el Oeste cercano, el 72% en el Oeste lejano, el 68% en Sureños del oeste y 72,5% en Intermedios. Opción Federal aportó el 8,6% en el centro, el 10,6% en Oeste cercano, el 9,7% en Oeste lejano, el 11,8% en Sureños del oeste y el 10,4% en Intermedios. Servicio y Comunidad sumó el 8% en el Centro, el 7,6% en Oeste cercano, el 9,8% en Oeste lejano, el 11,8% en Sureños del oeste y el 7,8 en Intermedios. Apertura Popular de Neuquén llevó desde el 4 al 4,7% en las cinco áreas y el Partido Demócrata Cristiano aportó el 5% de los votos en el centro, menos del 4% en Oeste cercano, lejano y en Sureños del oeste y el 4,3% en Intermedios.
Concejales
El MPN logró un triunfo holgado, con 39.335 votos, seguido por Une-PS, con 14.295. En tercer lugar se ubicó el FpV (justicialistas y radicales), con 9.965 sufragios, y Recrear obtuvo 6.994. Hasta aquí las cuatro fuerzas que obtuvieron alguna de las nueve bancas que se renovaron en la elección. Con estos valores, y por aplicación del sistema D’Hont, ingresaron –por orden– Mario Pilatti, Jorge Rodolfo Chaneton (ambos del MPN), Alejandra Barragán (Une), Teresa del Valle Páez (MPN), Néstor Burgos (FpV), Marcelo Javier Marchetti (MPN), Hugo Rauque (MPN), Fabricio Cascino (Une-PS) y Marcelo Bermúdez (Recrear).
En orden descendente, el MID obtuvo el quinto lugar, con 6.357 votos. Le siguieron Alternativa, con 6.227; el ARI, con 4.698; Servicio y Comunidad, con 3.948; El Frente y la Participación Neuquina, con 3.150 y Apertura Popular de Neuquén, con 2.024, en tanto que otras nueve fuerzas en forma nominal no alcanzaron los 2.000 votos.
FICHA TÉCNICA
Con los datos provisorios de las 63 escuelas, de hecho convertidas en centros electorales, se agruparon los 48 barrios en once áreas que se delimitaron a partir de la ubicación geográfica, por proximidad. La creación de áreas electorales y su denominación fueron arbitrarias, con el simple criterio de intentar explicar el comportamiento electoral de los ciudadanos de la capital neuquina.
No existen áreas electorales (conjunto de barrios) determinantes en términos cuantitativos. Por ejemplo, el centro registró más de 19.000 electores, equivalente al 16% del total, y es el de mayor cantidad de votantes. Por lo tanto, un resultado muy favorable en el centro no acompañado por valores similares en el resto de las áreas no incide en el conteo final.
En cantidad, sigue el área Oeste cercano, con eje en barrio Progreso y otros tres aledaños, que sumó casi 18.000 electores (14,6% del total). El Oeste lejano, con más de 16.000 electores (13,5% del total), tiene como sector principal a San Lorenzo Norte y aglutina otros siete barrios. El área de Intermedios comprende los barrios Belgrano, Mariano Moreno y Confluencia, con más de 14.000 electores (11,6% del total).
El área de Sureños del oeste incluye San Lorenzo Sur, Canal V, Huiliches y Valentina Norte, y tuvo más de 8.000 electores (6,7% del total). Las cinco áreas mencionadas (22 barrios sobre 48) suman el 62% del electorado de la capital neuquina.
Como áreas singulares se consideró a los barrios Parque Industrial, Valentina Sur y Santa Genoveva. Se trata de sectores que presentan algunas características que los diferencian de los barrios colindantes.
ANTONIO DANIEL ARIAS
Especial para "Río Negro"