| | La ambición reeleccionista del gobernador Carlos Eduardo Rovira (foto pág. 2) destronó de la agenda nacional a las esplendorosas Cataratas del Iguazú. El gobierno provincial impulsa la reforma del artículo 110 de la Constitución con el único objetivo de instalar la reelección de manera indefinida y, de lograrlo, Misiones se uniría al club de provincias con mandatos indefinidos.
El 29 de octubre los misioneros elegirán a los convencionales que cargarán con la responsabilidad de decidir si se modifica o no la Constitución provincial. La Convención estará integrada por la misma cantidad de legisladores. Es decir, el voto popular fijará a los 35 convencionales titulares y 7 suplentes que deberán debatir la viabilidad de la reforma del artículo 110, que ya fue modificado en el año 1988. En este caso lo que resuelva la convención se hará, no será necesaria la ratificación de la ciudadanía como en ocasiones anteriores.
Así, para impedir la reforma de un solo artículo la oposición deberá posicionar al menos 18 de los 35 convencionales, ya que las resoluciones de la Convención son aprobadas por mayoría simple.
La premura de los hechos devino en desinformación de un acontecimiento trascendental en la vida institucional de Misiones. El intento de perpetuidad en el poder, por los siglos de los siglos, cosechó críticas en los legisladores, senadores, en la Iglesia, en los gremios confederados y hasta uno de los constitucionalistas más prestigiosos del país, Gregorio Badeni, salió a desacreditar la embestida oficial. Badeni es asesor de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) y desde 1968 es profesor de Derecho Constitucional en la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El jurista no tuvo reparos para decir sobre la reforma que “no se compadece, con una sistema de república, la elección inmediata de los gobernadores, porque en una república no sólo se establece la periodicidad de los ciudadanos en un cargo político, sino la rotación de los gobernantes; esto hace a la esencia de una república”. EL OBISPO QUE ENFRENTO A UN GOBERNADOR Como Badeni otros muchos, de una u otra manera, alzaron sus voces contra el Estado absolutista que intenta instaurar Rovira. Pero el líder de la oposición en Misiones, indudablemente, es el obispo de Iguazú, Joaquín Piña Batllevell (foto pág. 3), quien encabeza la lista de candidatos a convencionales constituyentes por el Frente Unidos por la Dignidad (FUD) que se opone a la reelección indefinida. Este frente electoral representa una alianza histórica en defensa de la Constitución, integrada por el radicalismo, el socialismo, dirigentes justicialistas en medio de un partido intervenido, otra decena de partidos políticos y sindicatos.
La candidatura de Piña desestabilizó la campaña oficialista y la repercusión nacional que tuvo su imagen eclesiástica, aún más. El prelado se enfrentó con fuertes adversarios. En las dos décadas que vivió en Paraguay le tocó lidiar con el entonces presidente Alfredo Stroessner hasta que se vio obligado a dejar el país. En Argentina, este sacerdote jesuita nacido hace 76 años en Barcelona siguió su labor evangelizadora en Posadas. Hasta que, en 1986, el Papa Juan Pablo II lo nombró obispo de la diócesis de Puerto Iguazú.
Día a día Piña recibe más adhesión a su cruzada y alienta a todas las religiones a participar activamente de la batalla por la democracia. Pastores evangélicos y luteranos se han pronunciado a favor del cura rebelde.
Los constituyentes son propuestos por los partidos políticos. Deben cumplir con las mismas condiciones que para ser miembro de la Cámara de Representantes y gozarán de las mismas inmunidades mientras ejerzan sus funciones, cuyo plazo de deliberaciones no puede superar el año dado que, transcurrido ese tiempo, caducará el mandato. No podrán ser convencionales el gobernador, vicegobernador, jefe de Policía e intendentes.
Veinte de las 23 provincias argentinas reformaron al menos una vez sus constituciones desde que, en 1983, retornó la democracia. Santa Fe, Chaco y Corrientes no permiten la reelección de mandatarios. Formosa, La Rioja, San Luis y Santa Cruz contemplan la posibilidad de reelección indefinida, mientras que la gran mayoría permite que sus gobernantes sean reelectos una sola vez. Si la Convención lo decide, Misiones se convertiría en la quinta jurisdicción con mandato indefinido.
La reforma constitucional no tiene otra finalidad más que beneficiar a Rovira, quien es el único impedido de volver a disputar la gobernación dado que está cumpliendo su segundo mandato consecutivo. Carlos Rovira incursionó en política de la mano del ex gobernador y ex presidente de la Argentina por 48 horas, Ramón Puerta, quien actualmente es su enemigo público.
En la gestión de Puerta, Carlos Eduardo pasó de ser su secretario privado a director de Vialidad. Luego fue intendente de Posadas, quedando a un paso de Casa de Gobierno. Las elecciones a gobernador en 2003 fueron el momento de la disputa. Rovira, se alejó de la sombra de su mentor y se quedó con un segundo mandato.
No hay disimulos en las ínfulas napoleónicas encarnadas en la piel del gobernador. En su gabinete no queda espacio para quien piensa diferente. Sus últimos aprietes fueron a los intendentes cuya primera denuncia vino del alcalde de Posadas, la capital misionera, Jorge Brignole. Por estos días Brignole, que tres años atrás acompañó la candidatura de Rovira, ahora se siente más cómodo de la vereda de enfrente. Sus declaraciones no rimaron con la de los demás funcionarios roviristas y como consecuencia tuvo “aprietes” por parte del gobierno. La retención de la coparticipación municipal fue sólo el comienzo.
Rovira cuenta con mayoría en la Cámara de Representantes, designó cuatro ministros en el Superior Tribunal de Justicia pese a las críticas de la Federación de Colegios de Abogados, tiene el respaldo de 60 de los 75 intendentes y ahora busca limpiar el Tribunal de Cuentas que tuvo protagonismo nacional por haber denunciado en 2005 el incumplimiento en el reparto de las mercaderías a los comedores comunitarios que dependen del Programa “El hambre es más urgente”.
Hay más. En su expedición que busca convertir a Misiones en un feudo, también extendió su brazo al Partido Justicialista que está intervenido.
El traje de interventor es del diputado nacional por Corrientes, Hugo Perié, quien se reunió con el gobernador varias veces y, ni bien llegó a Misiones, retiró el sello del PJ del frente opositor a la re-re. Muy diferente al discurso que trajo cuando llegó a Posadas, actualmente el interventor libró a militantes y dirigentes a alinearse donde prefieran. El presidente Néstor Kirchner se aleja, dicen sus allegados, de la intención desmedida de uno de sus hombres.
Entre los logros de Rovira también figura la destitución de la corte misionera de Marta Catella por incumplimiento de los deberes de funcionaria pública y del delito de prevaricato en el ejercicio de sus funciones.
Esa es, al menos, la versión oficial. En realidad, existe otra. La magistrada incurrió en la osadía de fallar contra uno de los hombres de Rovira, Luis Benítez, que las últimas semanas encabezó un escándalo tras otro para reasumir la intendencia de San Vicente que meses atrás abandonó luego de una revuelta popular que dejó la municipalidad en cenizas.
En aquella ocasión el Concejo Deliberante resolvió destituir a Benítez por anomalías en su gestión y, una vez que el expediente llegó al STJ, la ministra Catella convalidó la decisión de los concejales.
La Constitución de Misiones tiene dos mecanismos ya sea para una reforma parcial o de varios artículos: la enmienda y la convención reformadora. Para cualquiera de esas alternativas es necesario el voto de las dos terceras partes de los integrantes de la Legislatura. Así, el pasado 30 de junio los diputados roviristas con el acompañamiento de tres opositores lograron aprobar el proyecto que convoca a elecciones el 29 de octubre para definir a los convencionales.
Por otro lado, el artículo 178 establece que la enmienda es aplicable ante la modificación de un solo artículo. Debe ser aprobada por la mitad más uno en un referéndum popular. Pero la utilización de este mecanismo no es obligatorio sino facultativo, o sea que queda librado a criterio de la Legislatura. Y, de hecho, los diputados ya descartaron este camino teniendo en cuenta la proximidad de la contienda de 2007. El tiempo es tirano, seguramente, piensan desde el gobierno.
Por primera vez en la historia de la provincia se convoca a elecciones para conformar la convención reformadora como lo establece la Carta Magna. Nunca se había utilizado este método, las tres reformas anteriores se hicieron por enmiendas ratificadas por la ciudadanía.
La Constitución fue modificada en tres oportunidades. En 1964 se reformó el artículo 31 por la ley 2.54|, con la cual se creó una Justicia del Trabajo que contempla condiciones dignas y equitativas de labor para el trabajador, jornadas limitadas, vacaciones pagas, entre otros beneficios. Más tarde en 1988 se llevó a cabo la segunda enmienda. Así, la ley 2.604 modificó el artículo 110 que quedó redactado de la siguiente manera: “El gobernador y el vicegobernador pueden ser reelegidos hasta por un período legal. Asimismo podrán sucederse recíprocamente por un único período sin derecho a reelección”. La última modificación fue en 2001, cuando por una enmienda se creó el Consejo de la Magistratura. GRISELDA ACUÑA
Especial para “Río Negro” desde Misiones Periodista del diario “El Territorio” de Posadas. Inmigrantes y tradición Misiones, provincia de frontera.
Calurosa. Tierra colorada. Verde, mucho verde.
Sus atractivos turísticos están a la orden del día en cualquier época del año. Las Cataratas del Iguazú y las Ruinas Jesuíticas de San Ignacio son la visita obligada.
Cuenta con poco más de un millón de habitantes y, a diferencia de las grandes urbes, la vida en las colonias se diferencia de la vida urbana.
Tierra de inmigrantes, que desde 1.800 comenzaron a forjar su futuro.
La religión madre es el catolicismo aunque hay otros 34 cultos no católicos que conviven y el número va en aumento.
La actividad económica se caracteriza por la producción de yerba mate y tabaco, la agricultura, la explotación forestal y la silvicultura. La oferta turística también es un estandarte de la tierra roja.
Pese a los cambios impuestos por el tiempo, la sociedad misionera es tradicionalista y conservadora. En tanto, los colonos, la gente que trabaja en la chacra, todavía provocan la movilización social.
La desventaja, por estos días, es la desinformación estratégica que reina en los pueblos e incluso en las ciudades. Sucede que en Misiones hay inmensos bolsones de personas que no terminan de comprender cabalmente qué se elige el 29 de octubre. Desinformación grave.
Sin embargo, se elige mucho de cómo será su futuro político-institucional. Una cuestión que hace a cosmovisiones sobre el poder y su ejercicio. Un tema que hace a todos los misioneros. |
