-Kodama critica a Bioy Casares por publicar intimidades de su amistad con Borges, ¿qué opina?
-A mí no me disgusta nada que se pueda leer. Me parece valioso. Dicen que hay cosas que no son ciertas. La "verdad", en sí misma, no es un tema que me interese como lector ni escritor. Pero las cosas que en ese libro se atribuyen a Borges o a Bioy son absolutamente asimilables a las cosas que uno pudo leer en Borges firmado por él mismo. Muchos de sus comentarios sobre libros y demás no difieren demasiado de lo que uno leyó sobre Borges y de cosas que estoy leyendo.
-¿Qué está leyendo?
-Desde hace un tiempo todos los días me reservo un ratito para leer veinte páginas de Borges, de Bioy. No quiero hacer más porque un día se me ocurrió hacer cien y terminé odiando el libro. Lo que este libro muestra es una inteligencia impresionante de un tipo llamado Borges, pero que a su vez resulta absolutamente poco inteligente porque esa inteligencia parece que tiene casi todo el día para reírse de la poca inteligencia de los demás. Esto siempre lo atribuí al tonto. Si yo soy inteligente, ¿por qué te tengo que sobrar? ¿Por qué tengo que divertirme "a costa de?". Y él no hacía otra cosa en su vida. Tenía una inteligencia fea, maligna. No creo que nadie que escriba en castellano no pueda reconocer que Borges es uno de los lugares más altos. Pero también te encontrás con que ese tipo que puede decir una cosa maravillosa cada catorce minutos, el resto de esos catorce minutos se dedicaba a menospreciar a toda la gente que se encontraba, incluso a su aparente mejor amigo que era Bioy, a quien jamás le leyó un libro o le dijo "Me gustó algo de lo que hiciste".