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Viernes 07 de Julio de 2006
 
 
 
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  La aventura continúa
Inesperadamente Johnny Depp ha terminado siendo el heredero de Burt Lancaster. Hasta hoy el cetro, dejado por el famoso actor y alguna vez acróbata de circo, permanecía sin dueño. Y no era Depp un hijo o sobrino artístico natural suyo. Ni siquiera estaba en la lista de candidatos.
 
 

Uno imaginaba que Depp pasaría a la posterioridad como un chico atormentado al estilo de Sean Pean, Mickey Rourke, Denis Hooper o James Dean, sobre todo por una serie de actitudes que incluían desde el cigarrillo permanente en los labios, hasta la destrucción sistemática de un cuarto de hotel pasando por su inconstante aunque dinámica vida amorosa.

Pero no. Depp sorprendió a todos con su paternidad, su mudanza a Europa y finalmente con un éxito colosal llamado "Piratas del Caribe". ¿Johnny Depp en una comedia de aventuras? Su apellido no parecía el más adecuado.

Sin embargo, funcionó. ¿Será acaso porque Johnny Depp es uno de los más interesantes y atractivos actores de su generación? Con Hollywood nunca se sabe.

Lo cierto es que el filme dirigido por Gore Verbinski rindió un particular homenaje a un género que siempre resurge de sus cenizas: el de aventuras. No casualmente estos piratas fueron producidos por Disney. Una película como "Piratas del Caribe: la maldición del Perla Negra", bien podría haber sido un filme de animación. Pero la apuesta de realizarla con actores de carne y hueso y muy cuidados efectos especiales (nada abrumador) le dio un giro estético a la trama que de otro modo no hubiera conseguido.

A lo largo de la historia del cine, el género de aventuras ha tenido grandes hitos y también dramáticos fracasos. Hablemos sólo en los últimos años: James Cameron es uno de los directores contemporáneos que más ha hecho por la causa. Existe un hilo conductor entre "Terminator", "Titanic" y "Gladiator". La sensación de inmensidad y extremo entretenimiento permanecen a flor de piel en cada uno de estos filmes. Todos fueron un éxito de taquilla. Y en esos 15 minutos iniciales de "Gladiator", Cameron brinda su nada humilde granito de arena al mar de la diversión.

Luego del éxito de "Gladiator" y la trilogía de "El señor de los anillos", dirigida por Peter Jackson, todo indicaba que aún había espacio para más. Quienes siguieron en la huella estaban en un error. "Troya" y "Alexander" resultaron tristes fiascos de público. Y ni hablar de su calidad artística.

Más allá de este antecedente los grandes clásicos del cine de aventura han sobrevivido a las zancadillas del tiempo. Lo irónico del asunto es que, si lo pensamos un poco, descubriremos que muchos de sus recursos volvieron a ser utilizados en nuevas y colosales producciones hollywoodenses.

La producción de "Gladiator" se inspiró no sólo en documentos, libros e imágenes de la época para recrear el circo romano sino que tomó elementos estéticos de la escena más impactante de "Ben Hur" en la que los carros romanos golpean furiosamente unos contra otros.

La propia composición del general romano Maximus, posee características muy similares, al Espartaco compuesto por Kirk Douglas. Una de ellas es la rara tozudez del héroe derrotado en su espíritu desde el principio.

Tanto "Troya" como "Alexander" le deben y no poco, en materia de fotografía y escenificación, a la maravillosa "Lawrence de Arabia", claro ninguna de las dos es digna de la magia de Peter O'Toole.

Incluso la divertida película de Verbinski (también director de "El anillo"), que en su tercer capítulo tendrá a Keith Richard en el papel del padre de Jack Sparrow, tomó prestada la escena en la que los piratas luchan contra un grupo de insufribles esqueletos del también clásico filme "Jasón y los Argonautas ".

¿Y cómo es que Depp se lleva parte de la gloria amasada por el bueno de Burt? Bueno, muy simple, sin poseer la presencia física de Lancaster, Depp ha logrado sintetizar en su propio cuerpo la alegría, el desenfado y la exótica galantería que caracterizó al pirata Vallo interpretado en 1952 por Burt Lancaster en "El pirata hidalgo". Un puente invisible une a ambos personajes tanto como a dos épocas del cine americano.

Dicho esto, no vendría mal aprovechar la era del DVD para revisar estos clásicos de todos los tiempos. Una lista a la que no podrían faltar los nombres de Errol Flynn (hay tantas película suyas para mencionar) y Jean Paul Belmondo (especialmente "Cartouche", de Philippe de Broca), entre otras producciones basadas en las vidas de César, Cleopatra, Marco Antonio o en catástrofes como la del Titanic, entre una multitud de héroes mitológicos.

¿Habrá espacio para la "Vida de los Césares" de Suetonio?

Tal vez sea demasiado para una tarde.

 

 


   

CLAUDIO ANDRADE

candrade@rionegro.com.ar

   
 
 
 
Diario Río Negro.
Provincias de Río Negro y Neuquén, Patagonia, Argentina. Es una publicación de Editorial Rio Negro SA.
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