1. Rafting
Es sin dudas una de las más elegidas por los visitantes patagónicos, quizás porque la belleza que encierran los ríos se vuelve más fantástica cuando podemos deslizarnos por sus rápidos y saltos, viviendo y sintiendo la frescura del agua.
Ideal para todas las edades, ya que las medidas de seguridad de los prestadores cada vez son mayores.
2. Trekking
Otra alternativa para todas las edades y condiciones físicas.
Caminar de un punto a otro desconocido, no sólo para conocerlo sino también para que nos quede la vivencia de la experiencia es algo que desde hace años se convirtió en sinónimo del turismo en la Patagonia argentina.
Pero no es todo: a esta actividad a pura adrenalina se suman refugios, estadías, pernoctes y demás agregados que no sólo sirven para que conozcamos lugares nuevos, sino también para hacer amigos y formar grupos para seguir haciendo trekking.
3. Canopy
Cada vez más de moda en la Patagonia argentina como chilena, el canopy (desplazarse por las copas de los árboles) es un nuevo deporte de aventura que conjuga adrenalina, velocidad y mucha acción.
Además, sirve para demostrarnos que más allá de la edad o la condición física podemos seguir sintiendo distintas sensaciones por ese gustito a lo desconocido, a no saber que vendrá. Ideal para practicarlo con amigos.
4. Mountain Bike
Cualquiera puede andar en bicicleta, pero todo cambia cuando se lo hace en grupo o bien cuando se planifica un recorrido, con un punto de salida y un punto de llegada, y una duración de tiempo estimado para dicha empresa.
Sin lugar a dudas, el mountain bike es otro de los deportes de aventura preferido por los visitantes de Interpatagonia.com que desde hace años viene haciendo furor en nuestra hermosa Patagonia.
5. Parapente
Aunque el aire no es para todos, basta con introducirse en este fascinante mundo de los pájaros para cumplir el fantástico sueño de volar.
El parapente es quizás desde hace unos años la forma más fácil de hacerlo, ya que la vela se carga en una mochila y solo debemos inflarla para despegar y empezar a tomar altura buscando térmicas que nos permitan mantenernos más tiempo en el aire.
Hoy en Argentina, la cantidad de escuelas que enseñan el deporte se ha multiplicado notablemente y el nivel de instructores es excelente, con pilotos que han viajado por todo el mundo para perfeccionarse y luego poder volcar este conocimiento en sus alumnos.
PABLO ETCHEVERS