Aportar tan altos porcentajes del recurso no renovable que mueve a todo el país, es la insignia de orgullo que posee cada habitante de esta ciudad. Hoy Rincón de los Sauces festeja su trigésimo octavo aniversario proveyendo petróleo y gas a las refinerías más grandes de la Argentina.

Con altibajos pero con reservas contundentes, Rincón ha tenido años de gran explotación hidrocarburíferas. Y otros, como el actual, donde sólo se limitó a seguir extrayendo las riquezas del suelo sin ser receptora de grandes inversiones.

Sin embargo, para el gobierno provincial, esta inhóspita área de Neuquén, sigue siendo la meca petrolera con la cual se sustenta el cincuenta por ciento del presupuesto provincial, fondos que hoy se reparten la mayoría de las localidades provinciales.

No se perfora desde diciembre del 2008 y no se concretan planes de inversiones serios desde mediados de 2007, pero la actividad es tan bien paga y rentable que, a dos años de no contar con una sola inversión en los yacimientos rinconenses, la localidad subsiste con los coletazos de los años de bonanza.

Fueron miles las personas que abandonaron la localidad del norte provincial y sólo se quedaron aquellos que aún mantienen un puesto en las operadoras y contratistas y otros que a pesar de ser desocupados pegaron ladrillos en Rincón y defienden su arraigo a pesar de las duras condiciones de vivir en un clima de desconcierto laboral.

Rincón espera las inversiones petroleras comprometidas en el marco de la renegociación de lo contratos petroleros.

Las empresas se quedarán con las áreas petroleras más ricas del país por una veintena de años más con la obligación de ejecutar inversiones de desarrollo pero, hasta el momento, ninguna compañía cumplió a pesar haberse concretado la extensión de los contratos en áreas de bombeo y en los ricos pozos petroleros surgentes.

Vida cotidiana

La localidad alberga aproximadamente a 38.000 habitantes, de los cuales un alto porcentaje no tiene vivienda propia y aseguran que Rincón debe dejar de ser una ciudad de paso para transformarse en un lugar para quedarse.

En rigor de verdad, en los últimos años, Rincón pasó a ser una localidad con cientos de familias de excelente constitución y abandonó aquella imagen de pueblo petrolero con hombres solos y cabarets. En por esto que el nivel cualitativo de construcciones de viviendas y comercios mostró una importante mejora.

La posibilidad de contar con mayor cantidad de calles pavimentadas, la reparación de veredas por parte de los mismos vecinos, el parquizado de jardines y otros aspectos que antes poco se tenían en cuenta son parte del cambio que experimenta la localidad.

Una cifra que muestra la gran cantidad de familias que habitan y apuestan en Rincón, es la notable de matrícula escolar entre los niveles iniciales, primarios y se secundarios, que actualmente llega a los cinco mil alumnos.

Producción

Las áreas productivas de Rincón de los Sauces, ubicadas a escasos cinco kilómetros del casco céntrico, comenzaron a mostrar los primeros resultados después de varios años de trabajo en tierras vírgenes.

Se trata de alfalfa que ya es comercializada en esta misma franja del norte neuquino como alimento para los animales de crianceros y otros productores de ganado.

El sector es relativamente nuevo y la extensión de tierras que abarca apenas si supera las treinta hectáreas.

Pero muchos observan con atención el resultado de las pruebas de siembras en esas tierras con la intención de invertir en cultivos mayores, dependiendo de los resultados de las parcelas menores.

Esta misma zona podría extenderse siguiendo la traza de la ruta provincial 6 sin alejarse de la orilla derecha del río Colorado, para obtener riego más fácilmente.

Mejoras

Entre las obras de 2009, la comuna destaca los espacios verdes (Plaza Independencia, Plaza Orosito, Plaza Barrio Oeste y Plaza YPF), la ampliación de la red de agua, la construcción del acueducto de interconexión de cisternas, el tendido eléctrico, el mantenimiento de establecimientos educativos, ampliación y remodelación de edificios municipales, la construcción de nichos en el cementerio y el emparejado, nivelación y mensura de terrenos.