La comunidad de Río Colorado cumple hoy un nuevo año de vida con la perspectiva de avanzar hacia la conformación de una ciudad moderna desde la infraestructura hasta lo institucional, que le permita así afianzar los logros alcanzados y plantear nuevos desafíos.
La historia nos muestra que en distintos períodos existieron luchas y contrapuntos de facciones antagónicas que postergaron el despegue de esta parte de la Patagonia. Revisar los pasajes de la historia doméstica, en ciertos casos, puede servir para aprender de los errores y no volver a cometerlos. Al mismo tiempo, conocer las dificultades que tuvieron los pioneros en su época puede contribuir para que las nuevas generaciones fortalezcan su espíritu y observen que no hay imposible cuando existe la férrea voluntad de avanzar.
Resulta necesario decir que el barrio Buena Parada es el origen de Río Colorado, lugar donde se produjo el primer asentamiento poblacional que tuvo la zona, posterior a la denominada Campaña al Desierto. En 1887 se habilitó a tres kilómetros de allí la estación ferroviaria donde comenzó a gestarse el "Pueblo de Burnichón" por ser esta familia la propietaria de las tierras en cuestión. La posibilidad de contar con la estación ferroviaria dio paso a un rápido crecimiento económico, comercial y poblacional del "Pueblo de Burnichón".
El 29 de marzo de 1901 el presidente Julio Argentino Roca firmó la resolución acordando a "Buena Parada, estación Río Colorado" como cabecera del departamento de Adolfo Alsina y asiento de las autoridades. Para este tiempo Buena Parada ya contaba con la escuela Nro. 14, una comisaría y juzgado de Paz, lo que implicaba no renunciar al privilegio de ser el centro más importante para entregarlo sin lucha al nuevo Río Colorado que avanzaba a partir de la estación ferroviaria. Esto trajo aparejado un cruento enfrentamiento entre ambas poblaciones separadas apenas por un puñado de cuadras, que se extendió en el tiempo. La inundación del río Colorado ocurrida en 1915 arrasó con Buena Parada y obligó a todas la autoridades y comercios a trasladarse alrededor del nuevo Río Colorado. Esta parte creció velozmente y consolidó un núcleo urbano que se ha extendido en superficie hasta estos días.
Río Colorado nació a partir del río que le dio su nombre y muy pronto su crecimiento y desarrollo estuvo ligado a la producción primaria. La horticultura, fruticultura y ganadería fueron los pilares económicos de la comunidad y continúan siéndolo en la actualidad. Apuntalar y acompañar a los productores significará garantizar el sustento que alimenta -en todo sentido- a la ciudad que quiere crecer.