En la recta final rumbo a su centenario, el club Pacífico se sostiene como el club emblema de la ciudad.

A cuatro días de cumplir 94 años mantiene sus actividades y le hace frente a las dificultades que atraviesan todas las entidades en la región. "Priorizar por sobre los resultados deportivos el compromiso de formar fundamentalmente personas de bien a través del deporte", es el legado que dejaron los fundadores y los actuales dirigentes lo cumplen al pie de la letra.

Hoy, la posta está en manos de Daniel Herrera, quien afirmó que "tenemos la responsabilidad de mantener y hasta acrecentar el patrimonio del club".

Comentó que "por supuesto que nos interesa el tema federado, pero sin arriesgar las cuentas. A los que presentan proyectos, siempre les aclaramos: ´acá no se venden metros cuadrados´".

El fútbol y el básquet fueron los deportes que surgieron con más fuerza desde la fundación, pero con el correr de los años se agregaron voley, pelota al cesto, bochas, ajedrez, esgrima, artes marciales, tenis de mesa, patín artístico?

Hoy la lista es más corta, pero otro de los puntos que destacó al club más viejo de la capital fue que siempre abrió sus puertas para estar presente o colaborar en cualquier expresión deportiva.

A veces se sumaron, otras no. Pero la dirigencia siempre estuvo dispuesta a negociar. "Con las cuentas estamos bien. Ajustados pero bien, equilibrados. El mayor problema es que no podemos alquilar el salón, por una cuestión de acústica, y se achicaron los ingresos. Pero lo hemos compensado por otro lado", explicó.

Y agregó que "recibimos un aporte de autoridades nacionales que nos permitió hacer la secretaría nueva en las instalaciones del centro; además de mejorar el quincho y terminar el vestuario de los árbitros en la cancha".

Precisamente, el de la cancha es todo un tema. Quedó una posición estratégica de la ciudad y muchas veces se habló de que es un predio ideal para construir grandes obras.

"Siempre vienen y nos dicen ´si vendes la cancha, esto´, o ´acá podemos hacer tal cosa´. Pero la realidad que nunca surgió algo concreto que sea beneficioso para el club", sostuvo.

Con los chicos de Educación Física Infantil (EFI), la cifra de deportistas "federados" llega a los 1.200. El fútbol y el básquet se sostienen como las disciplinas más numerosas, mientras que las otras subcomisiones activas son las de patín artístico, tenis de mesa y tiro con arco.

"Todos pagan su cuota social y con los padres, llegamos a unas 2.000 personas que se mueven alrededor del club", comentó Herrera.

Con esa movida social siempre surge la alternativa de dar un golpe y trascender. "Al deportista siempre le interesa el éxito y quiere ver sus colores en lo más alto. Si decidimos avanzar, jugar una liga B de básquet o un Argentino de fútbol, lo haremos. Pero sabemos, de entrada, que podremos afrontarlo", destacó el dirigente.

La sede central de los "aurinegros" es la histórica esquina de Alberdi y Córdoba.

En ese lugar tiene el salón, con entrada principal por Córdoba que se utiliza para distintas actividades deportivas del club y también es alquilado para eventos especiales.

Por Alberdi, en tanto, se accede al gimnasio, que tiene como actividad principal el básquetbol.

La cancha de fútbol ocupa el estratégico predio de las calles Mitre, Agote, Illia y Perito Moreno, escenario de acontecimientos que hicieron historia del deporte de la ciudad.

UNA RARA RIVALIDAD

Pacífico tiene en Independiente al rival de toda su vida, pero están lejos de haber construido una historia de odios.

Todo lo contrario: tienen una relación más bien light. En otras capitales envidiarían esa tranquilidad, pero la realidad es que es extremadamente suave, al punto de aburrir.
El ejemplo está a la vuelta de la esquina. Hace tres semanas se disputó el clásico por el torneo de la Liga de Fútbol del Neuquén y las chapas de las síntesis marcaron 250 personas. Muy poco para el partido más importante de la ciudad.

Y para colmo, en forma simultánea y a un par de kilómetros, en la cancha de Atlético Neuquén, Villa Iris -una especie de desprendimiento del "Decano"- tuvo más convocatoria (alrededor de 300 personas) en su partido ante el zapalino Don Bosco.

LOS 50 SE FESTEJARON A FULL

Sensacional: "Boca Juniors se presenta hoy en Neuquén con todo el plantel superior titular".
Así, textual, anunció el diario "Río Negro" el arribo del Xeneize a la capital.

A dos días de cumplir 50 años, Pacífico tiró la "casa por la ventana" y festejó a lo grande. Como se lo merecía tan grata celebración.

No hay cifras oficiales de la cantidad de gente que vio el partido -lo ganó Boca 2 a 0-, pero muchos testigos aseguran que la cancha ubicada en Mitre y Agote explotó.

La recaudación trepó a los 2.000.000 de pesos. Los memoriosos no dudan en afirmar que jamás de había alcanzado una cifra similar en un espectáculo deportivo.

Pero claro, Boca ya era en ese entonces la atracción que convoca multitudes y en Neuquén no fue la excepción.
Incluso, había socios privilegiados que ese 14 de setiembre de 1966 vieron el partido desde el costado del campo de juego. Estaban, con sus banquitos, a centímetros de la línea de cal.
Fue una noche bien decana, inolvidable.

Los visitantes se pusieron en ventaja al promediar el primer tiempo y antes del final de la etapa, el juez le anuló un gol al local.

Al público poco le importó y se dio el gusto de gritarlo. En el cierre, llegó el definitivo 2-0.
Si para festejar el medio siglo, llegó Boca. ¿Cuál será la visita-sorpresa para los 100?

SE NACE… O SE HACE

En las últimas dos décadas Pacífico cumplió con otros de los objetivos planteados por los viejos dirigentes: conseguir que los jugadores o ex jugadores empiecen a ocupar espacios en las distintas comisiones del club.
Y en ese sentido el fútbol y el básquet tienen sus referentes: Héctor Sepúlveda y Daniel Aráoz.

Los dos supieron vivir experiencias en otros clubes, pero son "Decanos" de alma.
"Lucho" Sepúlveda, junto a José Pepe Canale, es el "dirigente-DT-cobrador de entrada" que necesitan todos los clubes de la zona.

"Dani" dejó de dirigir, pero siempre está en algún lugar de las tribunas del gimnasio de calle Alberdi.

Sepúlveda es "nyc" en Pacífico y le hace honor a su apodo con una "lucha" diaria para que su equipo sea protagonista en los torneos domésticos. No tuvo buenas experiencias cuando se clasificó a los Argentinos y tienen una deuda pendiente que esperan cumplir rumbo al centenario: mejorar la cancha de Mitre y Agote.

Aráoz llegó a Neuquén para jugar en Independiente y logró el ascenso a la elite del básquet en 1989.

Sin embargo "cruzó el charco" -en realidad pasó unas vías- para dirigir a los equipos de básquet y con el correr de los años se transformó en un referente de la entidad aurinegra.

Los dos cumplieron con la meta decana, "ocuparon los espacios" y no habría que sorprenderse si en próximos mandatos están en los cargos más altos del club.