A la hora del balance, queda claro que Neuquén mantiene su lugar en el podio como una de las plazas más importantes del país para los artistas nacionales e internacionales.
Desde los últimos meses de 2008 hasta ahora se mantuvo una abultada agenda, tal cual viene sucediendo desde hace una década.
No obstante hay que decir que, pese al esfuerzo que hacen muchos espacios culturales independientes, aún se siente en la ciudad la necesidad de contar con un teatro apropiado para los espectáculos.
Un rápido paseo por las carteleras de propuestas culturales que dejamos atrás trae aparejada una sorpresa. El último año, pese a la crisis económica y a la gripe A, se mantuvo constante el número de espectáculos teatrales y musicales en gira, y no solamente con funciones en esta capital sino que las presentaciones se ampliaron al Alto Valle y la cordillera, fortaleciendo un circuito que posibilita a los artistas presentarse ante distintos públicos.
En el caso de Neuquén, durante el último año recibió a dos populares "imbatibles" de la balada romántica latinoamericana, en términos de convocatoria: Marco Antonio Solis, que por segunda vez colmó el Ruca Che, y Ricardo Montaner que apostó al público neuquino y nuevamente cantará hoy en el gigante del oeste para presentar su último CD.
En el capítulo del rock nacional e internacional, entre los artistas que brillaron en la grilla se destacan nombres como La Bersuit Vergarabat, Las Pastillas del Abuelo, Babasónicos, No te va a gustar, Massacre y Molotov, la banda mexicana que hizo rugir el boliche ubicado en cercanías del puente Neuquén-Cipolletti. También hubo varios exponentes del reggae (Resistencia Suburbana, Fidel Nadal, Gondwana) que convocaron a los seguidores del género en esta parte del planeta.
También pisaron fuerte este año los ya instalados en el corazón de los neuquinos como Javier Malosetti, Juan Falú, el trío Fattoruso-Mazza-Fattoruso, Juan Quintero, el Chango Spasiuk (consagrado en los escenario del mundo con su último disco "Pynandí, Los descalzos"), Ismael Serrano y Luis Eduardo Aute.
Una perlita fue la presentación de la joven contrabajista, cantante y compositora Esperanza Spalding, la norteamericana que a los 24 años tiene el talento de una gran dama del jazz.
A estos espectáculos hay que sumar la invasión sonora de Mayumana que llegó al Ruca Che para ensordecer al público con su show de danza, percusión y teatro; y, por otro lado, los entrañables sonidos murgueros de las compañías uruguayas Agarrate Catalina y Falta y Resto que trajeron al Español el cuerpo y el alma del carnaval.
Como siempre, la grilla neuquina se completa con las obras teatrales que vinieron de Buenos Aires y reunieron a muchos de los grandes actores de nuestro país. Propuestas como "Yo soy mi propia mujer", el unipersonal del genial Julio Chávez; "4 Jinetes apocalípticos"; "Confesiones de mujeres de 30"; "En la cama"; "Máscaras"; "La jaula de las locas"; "La oscuridad es música", el último trabajo de Fernando Peña; "Closer"; "Taxi 2"; "Serenata argentina", con Enrique Pinti a la cabeza; "Otelo", entre otras, se consagraron ante el público neuquino.