Tras una serie desgraciada de accidentes en la construcción de edificios, que incluso provocaron la muerte de una anciana de 84 tras el derrumbe de parte de una edificación, el municipio neuquino puso en marcha nuevas exigencias en materia de seguridad.
Los cambios se centran tanto en la protecciones que deben contar las construcciones hacia los terrenos linderos, así como también en lo que hace a los frentes que dan hacia las veredas. En este sentido uno de los cambios más importantes fue el dado en lo que hace a las dimensiones y materiales utilizados en las bandejas de construcción que, colocadas en los laterales de los edificios previenen la caída de pequeños materiales.
Las nuevas bandejas deben ser más grandes, tener en cuenta la dirección e intensidad de los vientos y estar formadas por materiales rí
gidos que permitan soportar el peso de los escombros y restos de revoque que en ellas suelen depositarse.
Entre las exigencias que incorpora la nueva ordenanza la 10.706 se establece la obligación de colocar vallas provisorias en el frente de las obras antes de comenzar con las tareas en sí, las cuales debe cubrir el predio completo y estar formadas por tablas de madera cepillada o placas lisas de metal y en todos los
casos no obstaculizar el tránsito peatonal.
En lo que hace a la seguridad al interior de las construcciones se estableció que se deben colocar protecciones en las aberturas y vacíos que la edificación tenga, se debe proteger las conexiones provisorias, fundamentalmente las de electricidad, y es obligatorio que los obreros utilicen arneses cuando realicen trabajos tanto el techados, como en el último piso construido y en las tareas en las que registren riesgos de caídas.
El 21 de junio de 2006, un aparente error en una bandeja de construcción terminó con la vida de Sofía Pacek, una abuela de 84 años que dormía en su cama cuando el desprendimiento de la bandeja repleta de decenas de kilos de escombros cayó sobre ella matándola en el acto.
El trágico accidente, que incluso derivó en el primer juicio político en contra del intendente Horacio Quiroga, puso sobre el tapete el tema de la seguridad en las construcciones ya que el edificio en el que se registró el hecho no sólo está destinado a ser un hotel lujoso con spa y gimnasio, sino que cuando se culmine su construcción se convertirá en el edificio más alto de la ciudad con un total de 17 pisos y dos subsuelos.
