La capital de la provincia atraviesa un período de auge de las construcciones comparable con el proceso que se vivió a principios de la década del ´80. Pero en esta oportunidad la mayoría de las obras en ejecución son edificios de gran altura que estarán ubicados en la zona céntrica.

Poco a poco, el centro comercial neuquino va modificando su fisonomía. La ciudad crece a un ritmo intenso y constante. Modernos e imponentes edificios se levantan sobre terrenos que por muchos años fueron baldíos.

Esta transformación obliga a las autoridades a adecuarse a las nuevas exigencias, tanto desde el aspecto de las normativas referentes a la planifi

cación urbano ambiental como desde la inversión en infraestructura para garantizar la prestación de los servicios básicos.

Otra de las consecuencias de la expansión inmobiliaria en la ciudad, que pasó a ser uno de los principales temas de debate, es la necesidad de profundizar el control de las obras en ejecución.

Este problema concentró la atención de la opinión pública a partir del trágico derrumbe de una estructura de contención en un edificio en construcción del microcentro, que provocó la muerte de una mujer de 84 años. Por ese caso, el intendente Horacio Quiroga enfrenta actualmente un juicio político.

Poco tiempo después, el debate sobre la violación de las normas de construcción volvió a sacudir a la población a raíz de un nuevo incidente, ocasionado cuando una masa de hormigón traspasó una pared e "inundó" el baño de un departamento lindero a un edificio en construcción. Luego se confirmó que la medianera tenía la mitad del grosor reglamentario.

Ambos hechos dejaron en evidencia que la comuna contaba sólo con 4 inspectores para controlar cerca de100 mil metros cuadrados en construcción. Sin embargo, el secretario municipal de Obras Públicas y Gestión Urbana, Marcelo Gamarra, recalcó que aún con un incremento del personal "hay situaciones que no se pueden controlar porque son responsabilidad de la firma que realiza la obra".

Los índices de construcción en la ciudad alcanzaron los registros históricos de hace dos décadas. Si bien este fenómeno comenzó a notarse desde principios del 2005, este año la cantidad de obras se incrementó. Sólo durante el primer semestre del 2006 el número de solicitudes de obras tramitadas en el municipio superó el total de las gestionadas a lo largo de todo año pasado.

El notable incremento de las construcciones también evidenció la necesidad de mayores inversiones en infraestructura por parte de las empresas encargadas de la prestación de servicios básicos -como luz, agua, cloacas y gas-. Un estudio del Ente Provincial de Energía del Neuquén (EPEN) determinó que en los próximos 5 años la demanda de electricidad en la ciudad crecerá un 60 por ciento.

Además, la expansión inmobiliaria actual demanda una nueva planificación de la ciudad. El futuro paisaje urbano de Neuquén estará conformado por un área céntrica cubierta por edificios de altura y nuevas zonas residenciales periféricas, tanto en el noroeste como en la costa del Limay.