En la ciudad de Neuquén y con mucho esfuerzo desinteresado de decenas de vecinos funcionan 26 bibliotecas populares que canalizan desde las necesidades de los alumnos de las escuelas cercanas hasta otras mucho más abarcativas de la mano del dictado de talleres de cocina, danza y costura.
El pasado 2 de agosto estas instituciones recibieron la buena noticia de que desde el municipio se incrementará considerablemente el aporte que trimestralmente reciben.
El cambio fue impulsado por el concejal por Recrear Marcelo Bermúdez, y apunta a prevenir el cierre de estos centros de formación debido a la falta de fondos. La nueva ordenanza establece tres categorías de bibliotecas populares, que dependen de la cantidad de libros y asociados que poseen, ya que hasta el momento todos los establecimientos percibían la misma remuneración de escasos 300 pesos.
Con la nueva legislación las bibliotecas más pequeñas pasaron a percibir mensualmente 1.120 pesos. En el caso de las sedes de medianas dimensiones el aporte asciende a 1.400 pesos, en tanto que las que representan la principal categoría perciben 2.030 pesos mensualmente.
Estos fondos aportados por la comuna apuntan no sólo a garantizar el mantenimiento y el pago del alquiler y los servicios de los lugares donde se emplazan.
Taxativamente la orde
nanza establece que del total de aportes que reciben por mes 700 pesos estarán destinados al salario de un empleado permanente, garantizando de este modo la presencia de, al menos, un bibliotecario por cada centro.
Una de las bibliotecas que percibirá 2.030 pesos por mes es la histórica Juan Bautista Alberdi.
Si bien en este caso el aporte no representa una solución a todos sus problemas, se da en sintonía con la aprobación del proyecto para construir la nueva sede de la biblioteca.
El nuevo edificio se emplazará en avenida Argentina y República de Italia, quedando el tradicional edificio del microcentro como un monumento histórico. En detalle el nuevo edificio contará con 1.054 metros cuadrados de superficie en su primera etapa y 1.250 metros cuadrados al finalizarse, obra que demandará una inversión estimada en 2.750.000 pesos.
El nuevo y debatido espacio permitirá a los lectores contar con cuatro veces más espacio y en principio sólo se construiría un edificio de planta baja aunque con proyección a consolidar un segundo piso destinado a salas de conferencias, talleres e incluso un auditorio.