Con como el agua y el aceite, pero se necesitan y hasta comparten algunos socios vitalicios. Tanto Pacífico como Independiente, a pesar las dificultades económicas y de apari- ciones de otros clubes, se sostienen como las referencias del deporte capitalino. Aunque estén lejos de los números de otras épocas, "decanos" y "rojos" ofrecen varias alternativas, algo que no se da con otras entidades, que están encaminadas pero que deberán esperar varios años para alcanzar la historia de los "grandes" de la ciudad. Sin dudas, la gran diferencia entre Independiente y Pacífico está en sus "apuestas". Mientras el "rojo" suele tirarse a la pileta -a veces no hay agua-, el "decano" mantiene su perfil bajo y evita hacer grandes inversiones. Las dos alternativas tienen sus pro y sus contras. Está claro que apuntar al deporte espectáculo, el de nivel nacional, es lo más atractivo. Pero también es cierto que para hacerlo hay que tener una buena dirigencia y, en especial, las cuentas claras. Cuando Gastón Sobisch tomó la posta en Independiente sólo encontró deudas. Y el mayor porcentaje se arrastraba de la época del básquet grande. Por eso, con un plan más austero, se decidió volver paso a paso y de hecho, el hijo del gobernador se negó a una invitación para el torneo de elite. En Pacífico, las reglas son claras: si hay plata, se encara un proyecto. Pero si se arriesga el patrimonio del club, la respuesta es un "NO" con mayúsculas. OBJETIVOS "DECANOS" Hoy por hoy, los objetivos están puestos en la infraestructura. La idea que concretarán los dirigentes, a corto plazo, tiene que ver con la construcción de los nuevos vestuarios en la sede de la calle Alberdi y la puesta en marcha de las obras para ampliar las instalaciones para albergar la actividad de EFI. Más adelante, la meta es levantar nuevas oficinas administrativas y un albergue para alrededor de 30 personas. Estas obras se suman a las que se realizaron durante este año, como la construcción de los vestuarios en la cancha de fútbol del 'decano' y el mejoramiento de este campo de juego y su sistema de riego. En la actualidad, el club de la calle Alberdi le ofrece a la comunidad fútbol, básquet, patín artístico, tenis de mesa, tiro con arco y educación física infantil. Más de 700 niños y jóvenes de todas las edades pisan las instalaciones "decanas". Todos ellos, de alguna u otra manera, estarán de festejo dentro de cuatro días, cuando el club cumpla nada menos que 90 años. Entonces será tiempo de recuerdos, de rememorar que sus colores no tienen que ver con una cuestión arbitraria (el negro se debe a los empleados del viejo Ferrocarril, el amarillo a los del Correo), de desempolvar numerosas anécdotas, de traer a la memoria los nombres de aquellos que marcaron a fuego la vida de la institución. OBJETIVOS "ROJOS" Solucionar el tema de la cancha de fútbol es la prioridad en Independiente. Ya se resolvió la apertura de la calle Perito Moreno y se le dijo adiós al viejo modelo. En principio, la idea era dejar un campo de juego para las divisiones formativas y entrenamiento. Sin embargo, la ausencia de un escenario en condiciones de usar para el Argentino B, cambió los planes. Hace unos días comenzaron las refacciones. Se van a anular los primeros escalones de la tribuna que da a la ruta 22 y es una fija que, al menos por este año, el "rojo" utilice su cancha para los partidos del torneo federal. La "Caldera" de básquet ya fue remodelada y será utilizada por el quinteto neuquino a partir del viernes, en una nueva edición de la Copa Argentina. Mientras, las actividades siguen. Además de fútbol y básquet, en el club se practica tenis, hockey sobre césped, handbol y tiro, con unos 700 deportistas, cantidad similar a la de Pacífico. El 27 de febrero de 2007, la entidad "roja" cumplirá 86 años y en la dirigencia sueñan con dar un paso importante. Por lo pronto, está bien posicionado en las actividades más importantes del país y el golpe puede llegar en cualquier momento. Los clubes Pacífico e Independiente se sostienen como los mayores referentes del deporte capitalino. Con tácticas particulares y disímiles se mantienen en vigencia ante los nuevos clubes que aparecen. OBJETIVO CANCHA El campo de juego de fútbol es la prioridad de los "rojos". UN DINO EN LAS GATERAS Maronese se proyecta como la tercera potencia en el deporte neuquino. Con apenas diez años de vida, el "Dino del Oeste" dio pasos gigantes. Ya tiene su ansiada cancha con césped y se dio el gusto de ser campeón en Lifune. En el debe todavía descansan unos puntos: falta la incorporación de disciplinas y que la gente de "enganche" con el club porque las convocatorias todavía son escasas. Otro de los novatos, más joven aún, es Villa Iris. En este caso, el plan fue inverso al de "Maro". Primero salió campeón y armó grandes planteles, y recién ahora empezó a pensar en la construcción de la cancha. Ya les otorgaron los terrenos y es tiempo de poner manos a la obra. PROYECCION El "Dino del Oeste" aparece tímidamente como tercera potencia. FALTA "PIMIENTA" Un Independiente-Pacífico por el torneo de Lifune no convoca más de 200 personas. La situación cambia en el básquet, pero no es para "volverse loco". Los duelos entre los grandes neuquinos no acaparan la atención y ahí fallan las dos dirigencias. En otros puntos se espera la fecha de un clásico. Pero con "rojos" y "decanos" queda la sensación de un partido más. El deportista se "muere" por los tres o los dos puntos, pero la gente no. Si al fútbol van 200 o al básquet 300 cuando se enfrentan entre ellos, qué decir cuando el rival es otro. La aparición de nuevos clubes de fútbol, en algunos casos desprendimientos de éstos grandes, pudo haber influido, pero es tema a revisar. Falta pasión, falta "pimienta". MEJORAR LA SEDE La principal preocupación de los "decanos" es la infraestructura. |