Los jóvenes ocupan un espacio cada vez más importante dentro de la población de la capital neuquina. Sin embargo, la oferta de centros de recreación nocturnos resulta insuficiente para la gran cantidad de adolescentes que cada fin de semana "invaden" el centro de la ciudad. Además son frecuentes los conflictos relacionados con el funcionamiento de los locales bailables en áreas comerciales y residenciales que abarcan aspectos muy variados, desde la contaminación auditiva hasta la inseguridad y falta de control. Esto motivó un debate profundo entre los concejales neuquinos con el objetivo de sancionar una nueva normativa que regule a los comercios del rubro. Una de las soluciones que está siendo analizada es la reubicación de las confiterías y locales nocturnos en una zona alejada del área céntrica. Cientos de jóvenes de distintos barrios confluyen los viernes y sábados a la noche en el microcentro. En muchos casos, los menores esperan el momento para ingresar en un local bailable. En otros, la "salida" consiste en reunirse en una esquina del centro con amigos o circular en auto por diversos centros nocturnos. Hay una concepción cultural de gran arraigo en la juventud de la ciudad relativa al enfrentamiento entre los chicos "del centro" y los "del oeste". Esta línea divisoria, invisible pero notoria, ha servido de excusa a más de un enfrentamiento. En muchos casos, el número de asistentes supera la capacidad del local. Esto provoca que una importante cantidad de menores ocupe el tramo de la vereda, o la calle, adyacente al comercio; convirtiendo la vía pública en una suerte de "extensión" del local. Si bien desde la comuna se endurecieron los controles, este tipo de medidas es insuficiente si no hay una normativa que prevenga las situaciones de conflicto. En el último año, los agentes municipales clausuraron alrededor de 50 locales bailables. Sin embargo, las infracciones y clausuras demostraron no ser la solución al problema ya que, con frecuencia, el mismo local fue multado en más de una ocasión por el mismo tipo de falta. A largo plazo, la salida que tiene más adeptos en el Concejo Deliberante es la de trasladar los centros nocturnos a una misma zona, que estaría en las afueras de la ciudad. Una de las propuestas es ubicarlos en el sector cercano al futuro Paseo de la Costa en el barrio Confluencia. CHICOS MOLESTOS El Concejo Deliberante analiza trasladar todos esos comercios al Paseo de la Costa en Confluencia. Ruidos y peleas son las denuncias más comunes. |