Fue un espectáculo para el asombro y a nadie pasó desapercibido. Miles de cipoleños se agolparon en la calle para ver, por primera vez en la región, a un grupo de bailarines que desafiando la gravedad subieron y bajaron por la fachada del emblemático edificio municipal.
Colgados de arneses, transformaron la pared en un escenario vertical involucrando y sensibilizando al espectador con movimientos que transmitieron potencia, energía y pasión a través del idioma universal de la danza y la poesía. Impactó.
La obra "Fuera de Órbita" (mayo 2009) significó la presentación en sociedad de la compañía Élevé Danza Vertical, un sueño-proyecto de Horacio Olano. Con una extensa trayectoria como bailarín aéreo fue el creador además de la primera escuela de danza aérea de la Patagonia que funciona en un antiguo galpón totalmente equipado para la nueva iniciativa.
La compañía que se atrevió a las alturas cipoleñas está integrada también por Nazarena Mon; Paula Mandini, Mariana Sturla, Marcelo Curotti, Eugenia Schilling; Eugenia Di Marco, Adriana Louvet y Violeta Zuvialde. Todos con experiencia en espectáculos de altura, muchos formaron parte de agrupaciones consagradas a nivel nacional e internacional como Ciadehecho, Fuerza Bruta o De la Guarda.
"Todos buscamos eludir la rutina. Sorprendernos y sorprender, desafiarnos y desafiar, transmitir y emocionar. Encontrar territorios distintos en los que estar cada día. Involucrarnos. Torcer la gravedad", aseguraron los bailarines de Élevé.
Horacio es el director de la compañía y se formó como bailarín en Buenos Aries, primero y en Madrid (España), después. Hacia allí viajó hace algo más de tres años para hacer un máster en administración de empresas y descubrió la danza vertical sobre fachadas de edificios.
Fue suficiente para conmoverlo y mostrarle otro camino. Y aunque no reniega de su profesión universitaria porque el conocimiento que adquirió lo ayuda en este emprendimiento, su imagen actual está asociada a la danza aérea.
Es más, cuando pensó en regresar a Cipolletti ideó el proyecto de la compañía y la escuela para poder readaptarse a la ciudad que lo vio nacer y crecer.
Si bien los bailarines que participaron en "Fuera de Órbita" son nueve, el staff permanente de la escuela de danza vertical es de tres personas: Olano, Mariana Sturla y Eugenia Dimarco, quienes además participaron de la coreografía de la nueva obra que presentaron junto a 30 alumnos en la antigua bodega Flor del Prado, el mes pasado.
El nuevo espectáculo -más bajo en altura que el primero- se armó especialmente para que puedan realizarlo los bailarines aéreos que se están formando en la escuela ubicada en esta ciudad. "La idea fue aprovechar las instalaciones de la ex bodega Flor del Prado, trasladando al espectador hacia una fábrica en pleno trabajo", explicó Horacio.
Adelantó que el objetivo es poder mostrar "Días de Fábrica", en otras oportunidades ya que los anclajes necesarios para la obra se hicieron a medida y quedarán instalados en el lugar.
La incansable actividad de Olano lo llevó también a comenzar a gestionar la posibilidad de presentar "Fuera de Órbita" en Chile. "Queremos hacer el espectáculo en las torres Titanium. Tienen una altura de 192 metros y fueron diseñadas por el mismo arquitecto que hizo Las Petronas de Kuala Lumpur", aseguró esperanzado en que la idea pueda llegar a concretarse.
Pero, ¿cuál es el objetivo de Élevé? ¿Qué buscan transmitir sus integrantes? "Perseguir nuevas dimensiones", es la respuesta más corta y contundente que ensayaron.