El ex presidente Néstor Kirchner evolucionó ayer "satisfactoriamente" tras la cirugía a la que fue sometido por la obstrucción de la arteria carótida derecha, estado que fue reconocido por su esposa y sucesora, Cristina Fernández.

Anoche, el último parte médico brindado sobre su salud aludía a la posibilidad de un pronto traslado del ex presidente a una habitación común.

"Se inicia el proceso de descomplejización de los cuidados intensivos", indicó el parte de las 22, firmado por el director de la Unidad Médica Presidencial, Luis Buonomo.

Según trascendió, el diputado podría recibir el alta el jueves para radicarse durante 20 días en El Calafate, en donde descansará de su agitada agenda diaria tras una recomendación de los médicos de la Unidad Presidencial.

Diversos especialistas coincidieron ayer en declaraciones a diversos medios que la recuperación del actual diputado implicará cambios en varios aspectos de su estilo de vida. Advirtieron que en principio deberá bajar el grado de exposición durante al menos un mes y evitar las situaciones de estrés

"Está muy bien", indicó ayer la presidenta respecto al estado de su marido y comentó que "tan bien está que cinco minutos antes de salir para acá me llamó por el celular del hijo", en alusión a Máximo, quien acompaña a Kirchner en su recuperación en el Sanatorio Los Arcos en el barrio de Palermo. Antes de participar de un acto en el partido bonaerense de Ezeiza, Fernández agradeció "la preocupación y el cariño, siempre adelante".

El cardiocirujano Víctor Caramutti, quien estuvo al frente de la operación del domingo en el Sanatorio Los Arcos, evaluó que la recuperación del diputado "ha sido evidente" tras la "satisfactoria" intervención, y ratificó que "en 48 o 72 horas el paciente va a estar de alta".

Los riesgos evaluados

El profesional admitió que "se decidió la intervención de urgencia" porque existía la "posibilidad de producirse daño cerebral", aunque aclaró que "hoy en día son operaciones de rutina" con rápida recuperación.

El ex mandatario recibió ayer la visita de su hermana y ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y de su hijo, Máximo, quien lo acompañó durante la jornada.

"Locomotora" no pudo

En tanto, el ex boxeador Jorge "Locomotora" Castro también llegó a la clínica para visitarlo, pero sólo pudo acceder a dialogar con un secretario del ex jefe de Estado, ya que aún se encuentra en una sala de terapia intensiva.

"Me dijeron que está muy bien y que en dos días más le podrían dar el alta", indicó Castro, ratificando la posibilidad de que Kirchner sea dado de alta el miércoles o jueves próximo.

La internación de urgencia de Kirchner sacudió el escenario político, ya que el ex presidente es considerado el hombre más influyente del gobierno de su esposa y del Partido Justicialista.

Kirchner renunció a la presidencia del PJ tras perder en las elecciones legislativas de junio pasado, pero su dimisión fue rechazada por la agrupación y se estima que en los próximos meses podría reasumir el cargo. No se descarta asimismo que aspire a postularse a un nuevo mandato en los comicios de 2011.

En el exterior de la clínica, sobre la puerta principal en la Avenida Juan B. Justo, continuó ayer la pegatina de afiches por parte de distintas agrupaciones de militancia kirchnerista, agremiados a camioneros, y organizaciones sociales, con expresiones de cariño para el ex mandatario.

La decisión de Kirchner de ser operado por un centro médico privado estuvo influenciada por la recomendación del médico y funcionario kirchnerista Donato Spaccavento, lo que generó una fuerte polémica (Ver aparte). (DyN)