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Está frenado el proyecto agrícola de Mari Menuco | ||
El canal que le daría vida no se construyó. Para reactivarlo habría que aportar $ 200 millones. | ||
NEUQUÉN (AN) - El proyecto de colonización agrícola de la meseta entre Mari Menuco y Neuquén, cuyo financiamiento justificó la emisión de bonos por 250.000.000 de dólares en los últimos años de Jorge Sobisch, ya no existe: el canal que le daría vida a esa enorme fracción de tierra desierta no se construyó y, a cambio, con los fondos se financió el tendido del extenso caño que lleva agua para uso humano a la capital provincial. La unidad ejecutora que había avanzado en un diseño novedoso de producción, sobre la base de estudios de una consultora israelí, quedó desmembrada, y ahora el futuro de plan de depende de que algún inversor esté dispuesto a desembolsar más de 200.000.000 de pesos. Sin este canal, el argumento de que la emisión de los bonos cambiaría la matriz productiva de la provincia, pierde su principal sustento porque el otro canal, el de Los Barreales, está en veremos, y hasta ahora la obra más importante que se inauguró, del grupo financiado con los papeles, es el autódromo en Centenario. Ni el complejo de escuelas especiales ya inaugurado ni el centro ministerial en ciernes parecen ser obras que vayan a modificar la fuente de riqueza de la provincia, que seguirá siendo por muchos años los hidrocarburos. El cambio de uso para los fondos destinados al canal Mari Menuco-Neuquén fue aprobado por la Legislatura en noviembre de 2008. La obra tenía asignada originalmente una inversión de 65.000.000 de dólares. Está claro que ese dinero no alcanzaba para el doble propósito que era irrigar, con un canal de 20 metros cúbicos por segundo de caudal, la meseta para colonizarla desde el punto de vista agrícola y subsidiariamente llevar un caño de menor capacidad para abastecer de agua potable a Neuquén y Plottier. Pero como ocurrió, si no con todas, con la mayoría de los trabajos financiados con los bonos de Sobisch, a poco de iniciados los trabajos se detectó que estaban subvaluados, lo que permitió sumarle a la ley de emisión de los papeles una cantidad de obras que de otra manera no habrían podido incluirse para sumar justificaciones al endeudamiento. El gobierno de Jorge Sapag decidió reformular el proyecto: se hizo un canal a cielo abierto de sólo 5 kilómetros para un caudal de 19 metros cúbicos por segundo y desde ese punto, un caño de casi 2 metros de diámetro y 16 kilómetros de largo, por donde se puede transportar agua en niveles de hasta 6 metros cúbicos por segundo. El ministro de Desarrollo Territorial, Leandro Bertoya, reconoció que no hay dinero para la colonización agrícola y que sin aportes del Estado es muy difícil que el proyecto avance. Se necesitan otros 60.000.000 de dólares, una cifra que sólo un grupo económico con respaldo y espaldas financieras puede llegar a invertir. "La provincia no pondrá un centavo", dijo el funcionario. Si el canal a cielo abierto se hubiera construido, el desarrollo sería más sencillo, aun sin el tendido de los ramales de ese conducto principal. Según los números oficiales, la obra terminada en su primera etapa (canal, cañería, planta potabilizadora y nexos) tiene un costo de 280.000.000 de pesos (unos 74.000.000 millones de dólares a cotizaciones actuales). Y aun así, para la provisión de agua potable a Neuquén y Plottier habrá que gastar algunas decenas de millones más. "El proyecto no está abandonado, vamos a convocar a inversionistas de riesgo para la colonización", anunció Bertoya. Explicó que se trabajará en varias líneas, desde la producción de semillas de alta calidad hasta forestación y biocombustibles. | ||
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