ROMA.- El ministro italiano del Interior, Roberto Maroni, anunció ayer que Italia introducirá un permiso de estadía por puntos para los inmigrantes, el cual se obtendrá con pruebas orales de italiano y conocimiento de la Constitución de ese país.
Los inmigrantes cuentan con dos años para acumular 30 puntos y en caso de no obtener la puntuación serán expulsados.
Entre los nuevos requisitos que se exigen para el permiso figura el conocimiento del idioma italiano así como de la Constitución, además de inscribirse en el servicio de salud nacional, un contrato de vivienda y escolarizar a los hijos.
Si después de dos años los inmigrantes no cumplen con los requisitos pero muestran tener buena voluntad, se le concede un año más.
Si cometen delitos o infracciones pierden puntos.
"Se trata de una medida para favorecer la integración", sostiene Maroni, entre los líderes del movimiento contrario a la emigración Liga Norte.
La nueva medida fue criticada por la oposición de izquierda así como los movimientos católicos, ya que consideran que "favorecerá la ilegalidad y dificultará la integración", declaró Livia Turco, del Partido Democrático (izquierda).
"En un país en el que se necesita al menos un año para renovar el permiso de estadía y en el que los cursos de idiomas los gestiona sólo la iglesia, no se puede pretender ser eficientes como Canadá", comentó.