Una oleada de malas noticias económicas que renovó las dudas sobre las finanzas públicas españolas provocó ayer un derrumbe en la bolsa local, que se extendió por Europa y afectó también a EE.UU y Latinoamérica.

La bolsa española cayó ayer un 5.94%, derrumbe alimentado por rumores de un posible descenso de la perspectiva de la economía española por parte de una de las grandes agencias de puntuación, Moody´s o Fitch. La otra gran agencia internacional de calificación, Standard & Poor´s, ya se pronunció negativamente en diciembre.

El principal temor de los in versores es que España siga el camino de Grecia, obligada a realizar un duro ajuste fiscal en medio de una recesión. Grecia es el principal deudor del espacio euro y hay temores de que la crisis Atenas pueda replicarse en España, Portugal e Irlanda.

España cayó en recesión a fines de 2008, tras el estallido de una burbuja inmobiliaria. A partir de allí, la economía no logra salir de una crisis profunda, marcada por una disparada del desempleo, cuyo índice de 18,83% de la población activa a fines de 2009 es casi el doble del de la zona euro, y por un aumento vertiginoso de la deuda y el déficit público.

El déficit público estalló, pasando de un excedente de 2,23% del PIB en 2007 a un déficit del 11,4% en 2009.

Mientras tanto la deuda pública de España, que en 2007 solo representaba el 36,2% de su PIB, ha aumentado hasta superar el 60% en 2010. Ayer, el gobierno español informó que entre sus previsiones económicas hasta 2013 figura un aumento de la deuda pública hasta el 74,3% del PIB en 2012.

Otra señal de advertencia vino ayer del Fondo Monetario Internacional. "La crisis en España es muy fuerte, originada en una situación inmobiliaria no muy lejana de lo que pasó en Estados Unidos, y por ello los españoles deben hacer un esfuerzo considerable"para reducir el déficit público, estimó el presidente de la entidad Dominique Strauss-Kahn a la radio francesa RTL.

Al ser consultado sobre la voluntad del presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero, de elevar de 65 a 67 años la edad de la jubilación, Strauss-Kahn respondió: "Comprendo la situación de Zapatero. Es muy difícil".

A las preocupaciones que viene de Europa se suman nuevos temores por la debilidad del crecimiento estadounidense y un posible enfriamiento de la economía china, que podría ensombrecer la recuperación global prevista para este año.

Por eso, las acciones en Wall Street tuvieron un fuerte tropiezo. El Dow Jones cerró con un desplome de 2,6%. El Standard & Poor´s cayó 3,1%, mientras el Nasdaq se desplomó 3%. Entre las noticias negativas destacó que el número de estadounidenses que solicitaron prestaciones por desempleo saltó de manera inesperada. En Europa el índice británico FTSE 100 perdió 2,2%, el DAX de Alemania bajó 2,5%. En Lationamérica bajó el São Paulo (-4,73% y Argentina 3,81%.

(AFP/DPA/AP)