Jueves 04 de Febrero de 2010 > Nacionales
Persisten diferencias en la relación comercial con Brasil
Argentina acordó reducir licencias no automáticas de importación, pero hay diferencias sobre cómo encauzar las relaciones comerciales entre los principales socios del Mercosur. 

El gobierno argentino se  comprometió hoy ante su par brasileño a reducir el listado de productos  sujetos a licencias no automáticas de importación, aunque ambos  mantienen diferencias de fondo sobre cómo manejar la relación comercial  bilateral.

Así lo dejaron expresado durante una conferencia de prensa el  secretario de Industria, Eduardo Bianchi; el secretario de  Desarrollo de Brasil, Ivan Ramalho, y el subsecretario de Comercio de ese  país, Welber Barral.

Bianchi aseguró que las licencias no automáticas aplicadas por  Argentina a importaciones fueron una "herramienta útil" para  sortear la crisis de 2009, ya que en la visión del gobierno argentino  sirvieron para preservar puestos de empleo.

No obstante, Ramalho insistió que en la visión del gobierno de  Brasil, tales medidas son "negativas" por cuanto considera que  agrega "incertidumbre" a los empresarios al momento de planificar  sus negocios.  

Pero Bianchi insistió en que Argentina pretende tener "un  mecanismo o herramienta que contemple las sensibilidades" de sectores  económicos que puedan ser vulnerables ante la competencia  exterior.

Los brasileños, igualmente, aceptaron que la caída del  intercambio comercial producida el año pasado se debió a la retracción  económica de ambos países antes que por el "proteccionismo  argentino" según se quejaban hace un año.

Luego de una intensa jornada de trabajo, calificada por ambas  partes de "positiva" y "cordial", Bianchi prometió analizar los  sectores que con la recuperación prevista para 2010 no necesiten más  las licencias, y flexibilizar en otros casos.

Pero también aclaró que "se van a mantener" en los sectores  donde sea necesario algún tipo de seguro para evitar problemas  sociales.

Fuentes brasileñas indicaron a DyN, luego de la charla con el  periodismo, que para el país vecino "los gobiernos no tienen que  entorpecer" las relaciones entre privados ya que aspiran a que se  terminen los acuerdos de limitación de comercio que desde hace  varios años vienen firmando los empresarios.

En definitiva, ambas posiciones reflejan que persisten  diferencias de fondo sobre cómo encauzar las relaciones comerciales entre  los principales socios del Mercosur.

Para Argentina, mientras subsistan asimetrías económicas  importantes, van a ser necesarios mecanismos de control de flujos  comerciales, mientras que Brasil prefiere evitarlos.  

Como 2010 será un año de mejora de la actividad, según  indicaron ambas partes, esperan aprovechar la presidencia pro témpore de  Argentina de la primera mitad del año, y la de Brasil, en la  segunda, para armar una agenda positiva.

Esto es, incentivar proyectos de integración de cadenas  productivas, salir en la búsqueda de terceros mercados, y evitar pérdida  de posiciones en los mercados locales.

Sobre todo Brasil advierte que sus empresas perdieron  posiciones en países latinoamericanos y en Estados Unidos, que sospechan,  se debe a los efectos de acuerdos comerciales y a problemas de  incremento de costos de logística y cambiarios.

Por otro lado, se reunió el Comité Automotor que tiene a su  cargo el monitoreo del comercio de ese rubro.

Al respecto, Ramalho anticipó que al igual que en 2009, el  intercambio de autos y autopartes "va a ser equilibrado" mientras que  Bianchi calificó de "exitoso" el acuerdo que rige para la  industria en la región.

DyN.

 

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