SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El Ejecutivo local impulsará este año una amplia reforma de la tasa de Inspección, Seguridad e Higiene (TISH) que grava a la actividad comercial y cuya performance recaudatoria actual está lejos de las metas planteadas por Economía. Una de las ideas en estudio es "ampliar la base imponible" con la incorporación de los profesionales liberales al universo de contribuyentes, ya que actualmente no tributan al municipio.
Otros cambios alcanzarán a las alícuotas que gravan de manera diferente cada actividad y en algunos casos arrastran distorsiones que el municipio buscará "corregir".
El secretario de Economía, Federico Lutz, explicó que el propósito es "hacer política tributaria" a través del ajuste de las alícuotas, a fin de poder "estimular o desalentar" distintas áreas de la economía, según lo que el municipio considere necesario.
El funcionario informó que en enero último la recaudación por TISH fue de $ 1.034.114, mientras que en el mismo mes del 2009 había sido de $ 1.005.274.
El aumento de apenas 2,8% está por debajo de lo esperado, ya que la inflación anual de Bariloche estimada en el proyecto de presupuesto fue del 15% y la tasa al menos debió seguir la evolución de ese índice, ya que depende en forma directa de la facturación global de los comercios.
En realidad, la actual gestión aspira a captar una porción mayor de ese movimiento económico y en esa línea estará planteada la futura reforma de la tasa.
En el proyecto de presupuesto 2010 que el intendente Marcelo Cascón envió al Concejo (y que finalmente resultó rechazado) subrayaba en sus fundamentos que no es posible estimar con precisión el nivel de cumplimiento de la TISH "por falta de datos en las bases municipales". No obstante aclaraba que "del volumen de negocios declarados en la economía formal, que asciende a los 3.000 millones de pesos anuales, la municipalidad de Bariloche apenas recibe tributariamente un 0,46%".
Lutz admitió que la recaudación de enero no sólo acentuó esa constante sino que resultó "deficitaria" porque repitió los números de 2009, cuando en el mismo período los insumos que adquiere regularmente el municipio aumentaron en promedio un 15%. Dijo que se proyecta revertir esa situación mediante la Agencia de Recaudación (ARBA) y el plan de "recupero de activos del sector público", que habían sido presentados como proyectos de ordenanza pero luego el intendente los retiró ante las protestas del Soyem.
Lutz aseguró que tras incorporar la opinión del gremio enviarán otra vez esas iniciativas al Concejo, "apenas comience el período legislativo".
En tanto, el proyecto de reforma de la TISH será planteado por Economía al resto del gabinete para su ajuste final y esperan remitirlo al Deliberante en menos de 60 días. Según el secretario de Economía, también tienen previsto crear la figura del "monotributo municipal" para simplificar el pago a pequeños contribuyentes.
En relación con los profesionales, un cálculo ligero indica que en todo Bariloche no son menos de 500 los que trabajan por cuenta propia. Lutz anticipó que deberán tributar porque "desarrollan actividad comercial".
En cuanto a las alícuotas de la TISH citó a modo de ejemplo que actualmente "el supermercadismo paga en conjunto la quinta parte de lo que pagan los kioscos", aunque vendan en muchos casos los mismos productos.