La catarata de títulos conseguidos en los últimos años en el fútbol italiano, no hizo mermar el hambre de gloria del Inter, que hoy comenzará a disputar una de las semifinales de la Copa de ese país.
El rival de turno es la Fiorentina, que marcha en el 11º del torneo doméstico, precisamente liderado por el equipo "nerazzurri".
"Cuando se llega a semifinales, lógicamente se quiere también llegar a la final (...) Pero la Fiorentina no es un rival fácil", adelantó el entrenador portugués José Mourinho, quien tiene previsto poner en cancha a varios de los argentinos en el plantel, como el goleador Diego Milito.
En la temporada anterior, Inter, que era tetracampeón en título, cayó ante la Sampdoria de Génova en esta misma instancia del torneo.
Mañana, en la otra semifinal, se enfrentan en el estadio Olímpico de la capital italiana la Roma y el Udinese, tercero y decimoséptimo en la Serie A.