| A casi un mes de su muerte, Sandro le ganó a la AFIP. La pelea entre ambos se originó por los impuestos que le reclamó el fisco por su espectáculo "Sandro. Treinta años de magia" y por "El hombre de la rosa", por considerarlos "espectáculos musicales" y no "espectáculos artísticos con música", tal como estaban inscriptos en Argentores. La Cámara de Apelaciones analizó el caso y concluyó, tal como sostenían Sandro, que se trataba de un "espectáculo artístico no musical" . | |