La belga Justine Henin, ex número uno del mundo y que llegó con una invitación, está en la final del Abierto de Australia y en un gran nivel. La europea eliminó en apenas 51 minutos a la china Jie Zheng con parciales de 6-1 y 6-0. Mañana buscará su octavo título de Grand Slam frente a la estadounidense Serena Williams.

Pareció una entrada en calor, pero fue una semifinal de Grand Slam. Henin volvió a demostrar porque tiene en sus espaldas siete títulos de los grandes. Pese a sus más de 16 meses de ausencia y su cercano regreso a los courts, le hizo sentir el rigor a Zheng, a la que despachó en apenas 51 minutos del "Rod Laver Arena" luego de un apabullante 6-1 y 6-0.

La belga, que se había retirado del tenis en mayo de 2008 siendo la número uno del mundo y que llegó al Melbourne Park con una wild card, demostró que la magia en sus muñecas aún está intacta y que físicamente se le puede exigir.

Todo pasó veloz para Zheng, de ser la primera china en acceder a las semifinales del Abierto de Australia a ser la que más rápido se despidió del mismo y casi sin oportunidades.

Serena, quien acumula once trofeos de Grand Slam, alcanzó su quinta final en Melbourne Park después de superar a Li con parciales de 7-6 (7/4) y 7-6 (7/1).

La estadounidense llegará a la final con un récord excepcional, ya que ganó las cuatro finales que disputó en el certamen oceánico en 2003, 2005, 2007 y 2009.

Henin y Williams se enfrentarán por primera vez en el Abierto de Australia, con ventaja de la europea por 7-6 en sus partidos personales y con estadística favorable para la belga en Grand Slam por 4-2.

En varones, el británico Andy Murray le ganó al croata Marin Cilic, por 3-6, 6-4, 6-4 y 6-2, avanzando a la final del certamen. Ahora deberá esperar por el ganador del partido que hoy jugarán el suizo Roger Federer y el francés Jo-Wilfried Tsonga.