CIPOLLETTI (AC).- "Si no hubiera llegado la policía, actuando como mediadora, podría haber pasado cualquier cosa, incluso una desgracia", dijeron voceros de la toma "Los Rosales" ubicada en la continuación hacia el sur del acceso cipoleño Lisandro de la Torre, en terrenos pertenecientes a la empresa Zoppi, donde los usurpadores, unas 20 familias, han levantado desde hace varios días unas muy precarias casillas de cartoneras y paja, instalándose allí porque pretenden un utópico reconocimiento propietarial.
Los momentos de tensión casi extrema se produjeron ayer pasadas las 8 cuando empleados de Zoppi, con motoniveladoras y otras maquinarias, comenzaron a cercar el predio conocido como "Las Canchas", ubicado junto a las tierras ocupadas, posteando para después poner alambradas de protección y de defensa ante otras potenciales usurpaciones. Igual tarea se hacía en un predio que enfrenta a "Las Canchas".
Como los empleados tenían directivas de cercar también, con el posteado, una calle, desnivelada, que se abre entre la toma y "Las Canchas", los ocupantes se opusieron dado que -dijeron luego- "es vital para nuestra comunicación e ingreso al "barrio".
Ellos mismos llamaron a la policía y efectivos de la comisaría Cuarta, mediando, lograron que no se cierre la calle hasta que no se exhiba una orden del juzgado competente, ahora el Penal 6 del doctor Gustavo Herrera pero a partir del lunes, por término de la feria judicial, el 2 de María del Carmen García García.
Pasadas unas horas, los empleados de Zoppi se limitaron a seguir con el posteado pero dejando, por ahora, "liberada" la calle, mientras los vecinos seguían alertas todos los movimientos.
El hecho de que en 20 días se han producido tres tomas genera preocupaciones institucionales y de la comunidad en general.
Desde el municipio, voceros calificados reiteraron que las tierras habilitadas por ordenanza para viviendas son las del Distrito Vecinal Noreste, y esperan que se instalen allí unas 3.000 familias. Hay varias cooperativas que han adquirido terrenos, los que ya desmalezados, se hallan listos para las mensuras barriales. Para evitar la presencia de "okupas" los propios vecinos patrullan el perímetro.
Y hay inquietud en ámbitos de los fueros Penal y Civil de la IV Circunscripción Judicial con sede en Cipolletti y cuya máxima autoridad es el superintendente y camarista Edgardo Albrieu.
Un experimentado penalista confió inclusive que "en cuestión de pocos días" habrá una reunión "clave" de jueces en Cipolletti, con el fin de analizar el tema de las ocupaciones y tratar de llegar a un marco de estrategia común, pero respetando la interpretación de cada magistrado.
Y un hombre allegado a Albrieu -quien no estaba ayer en la zona- resaltó inclusive que en este tema hay cierto consenso en la justicia que para lograr soluciones sin graves consecuencias sociales debería haber "una especie de complementación" entre los gobernantes y la tarea judicial "aunque respetando la independencia de cada uno y con cada uno haciendo lo que le corresponde por competencia".
