El 3-2 final en el "Cementerio de los Elefantes" de Santa Fe fue con aplausos, pero sin una euforia desmedida. El primer paso de Colón en la Libertadores fue con éxito, pero la Universidad Católica hizo dos tantos, que pueden ser claves en el partido de vuelta a jugarse en Chile.
"No nos tiene que hacer goles...", clamó el DT sabalero Antonio Mohamed en la previa. Es que en estos duelos de ida y vuelta, y con tantos de visitantes que "valen doble", es vital el cero en casa. De todas maneras, en Colón son optimistas, ya que un empate en el "San Carlos de Apoquindo", los colocará en la fase de grupos de la Copa.
Las cosas comenzaron de maravillas para el equipo local. El partido no había regalado aún ninguna emoción cuando Federico Nieto, desvió un disparo desde afuera de Gómez para el 1-0. El estadio sabalero era un hervidero, Colón tomaba rápidas ventajas y obligaba a que la Católica abandonara rápidamente un supuesto planteo defensivo. Fue lo peor que le pudo pasar al equipo de Mohamed.
Católica pasó a dominar ampliamente las acciones, principalmente gracias a la tarea de Damián Díaz, quien comenzó a manejar los hilos del equipo trasandino, que desbordó a Colón.
A los 34´ el trámite se tradujo en el marcador. Gran jugada de Díaz, centro de Toloza y cabezazo franco de Morales para el 1-1. Lo que siguió de ahí al final de la primera etapa, fue todo de los chilenos, a excepción de un gol increíble que se comió Moreno y Fabianesi abajo del arco, poco después del empate parcial.
Para el complemento Mohamed dispuso el ingreso de Lucero por ´Ricky´ Gómez, y poco después el del Chacho Coudet por Moreno y Fabianesi, dos que debutaban en el Sabalero. Los cambios despertaron al local, que fue más incisivo y obligó a la Católica a no ser tan agresivo arriba.
A los 20´ un disparo de Garcé a la salida de un corner, fue retenido a medias por el ´1´ visitante, Paulo Garcés. El rebote lo tomó el siempre vigente Bichi Fuertes, quien adelantó a Colón. Tres minutos después, Capurro robó una pelota en la mitad de la cancha, Bertoglio se fue solo al gol y con un soberbio remate al ángulo estiró ventajas.
El 3-1 era un buen resultado para cruzar la cordillera. Pero a falta de 10 minutos para el cierre, otra vez Morales estuvo más despierto que los centrales locales e ilusionó a su gente para el cotejo de vuelta al marcar el 2-3.