BUENOS AIRES.- El gobierno nacional y Mauricio Macri coincidieron ayer en rechazar el uso de las Fuerzas Armadas para combatir la delincuencia común, como propuso Eduardo Duhalde, y se recordó que una ley prohíbe ese trabajo a los militares.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, salieron al cruce de que los militares se encarguen de la seguridad interna.
Duhalde había criticado ayer al gobierno nacional al pedirle "dejar de humillar" a las Fuerzas Armadas y pidió que intervengan para combatir la inseguridad.
"Quisiera ver cuáles de sus legisladores, entre los que está su esposa (Hilda González de Duhalde) han presentado una iniciativa en ese sentido. Van a perder mil a cero porque nadie está dispuesto a aceptar que un militar tenga funciones propias de las fuerzas de seguridad", advirtió el jefe de Gabinete.
En diálogo con radio 10, aclaró que "la Argentina ha dictado sabiamente hace un tiempo atrás la ley 24.059, que es la norma de seguridad interior, donde dice con toda claridad que las Fuerzas Armadas no pueden participar en condición de fuerzas de seguridad".
Al respecto, Fernández añadió que "esta realidad es la que debemos sostener porque lo que se busca es precisamente no alentar a la presencia de las Fuerzas Armadas en acciones que no son compatibles con las funciones específicas para lo que son entrenadas, sino además, evitar la colisión con la sociedad argentina, que no quieren que las Fuerzas Armadas estén". El funcionario remarcó que "hay una amplia mayoría que no quiere que el Ejército o las demás Fuerzas Armadas estén involucradas en operativos de seguridad".
Por su parte, Macri consideró que las Fuerzas Armadas deberían ser usadas "para mejorar los controles fronterizos del país ante el accionar del narcotráfico", pero rechazó la idea de que puedan intervenir en la lucha contra el delito.
"Las fuerzas militares podrían ayudar a controlar las fronteras de la Argentina, que hoy están siendo muy vulneradas por el narcotráfico internacional, especialmente el latinoamericano. Hay un rol que las Fuerzas Armadas pueden cumplir allí, pero no así en la calle porque están entrenadas para otra cosa", afirmó Macri. Macri además criticó que "se ha desinvertido en términos de seguridad, como lo vemos diariamente por la falta de equipamiento de la Policía y de todas las fuerzas militares".
El Partido Comunista, por su parte, también sumó cuestionamientos a la propuesta de Duhalde.
"Merece nuestro más enérgico rechazo", expresó el secretario general del Partido Comunista, Patricio Echegaray, quien aseguró que "la verdadera humillación y descrédito para las Fuerzas Armadas son los delitos de lesa humanidad cometidos contra el pueblo Argentino en el marco del terrorismo de Estado".