Cerrado el acuerdo para la llegada de José María López a la Fórmula Uno, crece la expectativa sobre el anuncio oficial que se daría hoy. Es muy probable que la "cumbre" se realice en una sede gubernamental.
La reunión del viernes en la Casa de Gobierno entre el dueño y director deportivo del equipo USF1, Peter Windsor y el ministro del Interior, Florencio Randazzo, terminó de cerrar el acuerdo y se especula con que podría ser la propia presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, la que se encargue de comunicar la nueva buena deportiva.
Solo eclipsaban el panorama el conflicto en el Banco Central, en tanto los anuncios sobre la actividad de la Presidenta que dio la Subsecretaría de Comunicación se limitaban a una actividad en La Matanza.
El gobierno, a través de la Secretaría de Turismo, que encabeza Enrique Meyer, aportará 2 millones de dólares, un cuarto del presupuesto para la butaca de Pechito, de 26 años, en el USF1, un equipo debutante y en plena elaboración del Type 1, el auto que será probado en febrero en Alabama y saldrá a pista en el comienzo del campeonato, el 14 de marzo en Bahrein.
Los otros 6 millones los aportarán privados, entre ellas la Top Race V6, en la que salió campeón Pechito en 2009 -también ganó el TC 2000 y fue segundo en el TC- que preside Alejandro Urtubey, hermano del gobernador de Salta, Juan Manuel.
Windson llegó a Buenos Aires el miércoles y recorrió despachos y empresas para conseguir los avales de pago pero se encontró con ausencias de directivos por las vacaciones, llevando incertidumbre a Pechito y su entorno más cercano.
Pero la tranquilidad llegó cuando el viernes se produjo la reunión con Randazzo, tras lo cual Windson volvió a reunirse con Pechito en un hotel de Retiro para definir la actividad. No obstante, los protagonistas se llamaron a silencio a la espera de que sea el gobierno el que anuncie la vuelta de un argentino a la F-1.
