En el cierre, el balance de esta edición de la Fiesta de la Pera es altamente positivo. Es que por primera vez toda la población tuvo la chance de ver a los artistas gracias a que los organizadores, el Sindicato de Camioneros y el Municipio de Allen, decidieron que la entrada sea libre y gratuita. Además, una serie de innovaciones dieron otros aires al evento. Por ejemplo la apertura de un escenario alternativo le otorgó la posibilidad a casi una veintena de grupos artísticos de poder expresarse ante un interesante marco de público que se sumó a la globa del Área Cultura del Municipio allense.
Los espectáculos de artistas callejeros que estuvieron en la fiesta también fueron interesantes puntos de atracción para los visitantes. La puntualidad del escenario y la buena coordinación que logró la organización casi en su totalidad, fue otro de los puntos a favor. En síntesis, mucho para ver y disfrutar.
Lo que debería ser un aspecto a corregir son los controles en el consumo de bebidas alcohólicas dentro del predio. Por caso se pudo ver a algunos menores tomando cerveza y hasta se registraron aisladas peleas fuera del predio ferial y en la zona de la salida como consecuencia del alcohol.
Por último fue buena iniciativa generar un espacio de mil plateas gratuitas para jubilados, discapacitados y embaraza- das. Pero hubo algunas personas no contempladas en esa diferenciación, que deseaban acceder a la platea abonando un lugar. Sería bueno que se considere esa posibilidad.