LOS ÁNGELES (DPA) - Mientras espera que se haga oficial la oferta para interpretar por quinta vez a Indiana Jones, el actor Harrison Ford no renuncia a realizar películas más al estilo del cine independiente, con papeles adaptados a su edad y donde puede demostrar su extensa carrera profesional, como en "Extraordinary Measures", que protagoniza junto con Brendan Fraser.
La película, que se estrenó en las salas de cine de Estados Unidos el 22 de enero, cuenta una historia basada en hechos reales: el drama de una familia de clase acomodada de Oregón en su lucha por salvarle la vida a sus dos hijos. La enfermedad, poco frecuente y genéticamente hereditaria llamada Pompe, no les permite caminar, comer y ni siquiera respirar por ellos mismos.
En el proceso, sus vidas se cruzan con un científico, Robert Stonehill, un tipo arrogante y testarudo, pero con el genio y talento capaz de dar con la fórmula para acabar con una enfermedad degenerativa e incurable hasta entonces.
Fraser, muy conocido por su papel protagonista en "La momia", se mete en la piel de John Crowley, un exitoso ejecutivo de una compañía biotecnológica a punto de conseguir una importante promoción.
Sin embargo, su búsqueda de una solución para salvarle la vida a sus pequeños le lleva a abandonarlo todo y a irse a vivir junto a Stonehill en Nebraska, después de una esclarecedora conversación entre cervezas y hamburguesas.
En ese momento es cuando asume el control del filme el omnipresente Harrison Ford, que recurre a toda su experiencia para dar vida al peculiar carácter de Stonehill, un investigador muy metido en sus fórmulas y teorías aunque sin la fuerza necesaria para conseguir que una farmacéutica importante le haga caso.
La unión de fuerzas entre el tesón del padre tratando de salvar los hijos y el científico, conmovido por primera vez en su vida por una causa semejante, logran poner en marcha una empresa con capital privado que acaba por desafiar a lo descubierto por la comunidad científica estadounidense en ese momento.
Para Fraser, es un punto de ruptura de sus habituales papeles de cómico juvenil dirigidos hacia un público adolescente.
El guión de Robert Nelson Jacobs exige al actor expresar una mayor carga emocional de lo que se le había visto hasta la fecha. Aunque Fraser asegura que está dispuesto a hacer de todo y que si siguen llegando proyectos como los de "La momia" seguirá aceptando el reto.
Por su parte, Ford dejó claro que la película pretende entretener y no inmiscuirse con los asuntos de la comunidad científica, en una cinta en la que el protagonista de "Blade Runner" es también productor ejecutivo.
Asimismo, Ford comentó días después de terminar el rodaje cómo fue su encuentro con la familia en la que está basada la cinta, los Crowley, residentes en Princeton, Nueva Jersey. "Pudimos aprender mucho de ellos. Intentamos ser fieles a su historia en la película", señaló.
En la actualidad los hijos de los Crowley, Megan, de 13 años, y Patrick, de 11, han logrado sobrevivir a la mortal enfermedad de Pompe, una patología hereditaria que en niños produce insuficiencia cardíaca y distrofia muscular.
En cuestiones estrictamente cinematográficas, la cinta dirigida por Tom Vaughan recuerda, y mucho, a la protagonizada por Susan Sarandon y Nick Nolte, "Un milagro para Lorenzo", una agradable sorpresa para la crítica que narra la historia de unos padres en la lucha por salvarle la vida a su hijo Lorenzo, enfermo de ALD (Adrenoleucodistrofia). Claro que "Extraordinary Measures" no llega a esos niveles y se queda en una película que cumple con entretener pero que no llega a emocionar demasiado. Tampoco ha entrado en la lista de los premios más importantes que se entregan en los primeros meses del año en Hollywood, y a estas alturas no parece que vaya a cambiar su suerte.
Liliana Martínez-Scarpellini