La poesía es la más bella expresión en palabras de la vida y sus contingencias.

Desde el amor apasionado hasta la generosidad de la naturaleza son traducidos en versos que se acomodan según la inspiración de la mano que los dibujan.

Así nos topamos con la cadencia insinuante del andar de esa bella mujer de cintura inexistente, con cuerpo de guitarra, imponente sobre unos interminables tacos aguja, maravillosamente seductora en sus labios siempre rojos.

La suave brisa y el murmullo del arroyo obstinado acompañan el alboroto de niños que rechazando cualquier sometimiento consagran la libertad primera.

La vida se hace presente desde su comienzo hasta el inevitable final. Plena de días brillantes de celeste cielo, de sol intenso, de abrazos de amigos en los buenos momentos, confundida con jornadas grises que ya pasaron por el milagro del tiempo.

Natura aparece en poemas que dicen de mares bravíos, de lagos mansos, de nieves eternas.

El honor, la honestidad, la decencia son las virtudes resaltadas cuando el asunto que preocupa al escritor son los valores que le dan sentido a la vida en comunidad.

Así, los versos apuran la pluma ansiosa del poeta. En ellos se pone de manifiesto lo más puro, lo más valioso del ser humano traduciendo vivencias, pareceres, lugares y sobre todo sentimientos y sensaciones que son desnudados sin pudor por el decir del hombre sensible.

Por lo expresado, la novelista, poetisa y profesora Irma Chacon ha dicho: "El lenguaje poético también puede contribuir a la construcción de una Sociedad más justa, más sólida e igualitaria, convirtiéndose así en un arma cargada de futuro, como decía Gabriel Zelaya? un futuro en el que no tenga cabida la violencia contra la mujer, los niños, los desfavorecidos ni contra nadie" ("Poesía y arte para combatir la violencia de género". Universidad Carlos III de Madrid, en www.plataformacinc.es).

Ahora bien cuando este género literario -que otorga beneficios tan extraordinarios tanto para el placer del espíritu como el mejoramiento de las contingencias vitales y la vida social e institucional- se expone oralmente, la palabra se convierte en maravillosa magia y por eso es absolutamente necesario que en las escuelas, la familia y los medios de difusión audiovisuales la lengua oral ocupe un lugar destacado.

Así, pues, como enseña el profesor español José Ángel López Herrería: "Poesía y educación. Muchas pueden ser las razones de esta simbiosis, absolutamente cercana y vivencial? todas se resumen en una; que la palabra es lo más humanizante y que la poesía es la elaboración humana en que de forma espontánea y también reflexiva más se hace presente el cuidado e interés por las palabras" (www.declamando.com/educacion ).

Sobre la base presentada el autor crea el mensaje a educadores sobre la importancia de la poesía en la educación y del aprecio del manejo del uso y del goce de la palabra. Finalmente comentaré una anécdota que, a la vez que me enorgullece, muestra la importancia de la poesía como medio de comunicación y transmisión de conceptos sustanciales. En este caso fueron los valores.

En efecto en el año 2007 el poeta, escritor y declamador colombiano don Abelardo Cano (www.abelardocano.com) me solicitó poemas de valores de los cuales soy autor y que obran en la página web www.ningo.com.ar para incluirlos en su programa de radio Ondas de la Montaña de Medellín, Colombia, días antes de las elecciones locales, con el objeto de remarcar en los votantes la necesidad de elegir a candidatos que en su estilo de vida respetaran el honor, la honestidad, la decencia, que rechazaran la impudicia, siguiendo la doctrina que postulaban mis versos.

El programa fue un éxito y hoy me enorgullezco de mantener con el poeta Abelardo Cano una rica amistad.

Héctor Luis Manchini

DNI 7.779.947

hectormanchini@gmail.com

San Martín de los Andes