BUENOS AIRES (DyN).- La respuesta que la Argentina debe enviar a la Comisión de Valores de los Estados Unidos (SEC), para aprobar el prospecto del canje de deuda defaulteada, sufrió ayer una demora, debido a la imprecisión reinante en torno de la situación del presidente del Banco Central, Martín Redrado.

Los técnicos del Palacio de Hacienda estuvieron trabajando intensamente durante la semana para completar los requerimientos de la SEC, pero a partir del fallo de la Cámara Federal en lo Contencioso Administrativo, el trámite sufrió una demora hasta tanto no se conozca la situación final de Redrado.

Sobre este tópico, la comisión parlamentaria que tratará el pedido de remoción de Redrado fue convocada para el martes próximo y se presume que se podría expedir en un plazo bastante prolongado.

El gobierno espera terminar rápidamente con este trámite administrativo para avanzar con el canje, cuyo primer paso será la gira de presentación (road show) que los funcionarios de Economía realizarán por las principales plazas financieras del mundo, es decir Estados Unidos, Europa y Japón.

De acuerdo con lo informado, las observaciones realizadas por la SEC estaban relacionadas con las mediciones del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), especialmente las referidas a la inflación, con el Fondo del Bicentenario y con la situación del presidente del BCRA.

A pesar de esto, en los últimos días, el ministro de Economía, Amado Boudou, dijo que "el proceso (del canje) avanza a toda marcha y a todo ritmo". El gobierno espera una adhesión del "60%" por parte de los tenedores de bonos en default, cifra que esperan alcanzar a partir de las presentaciones que realizará Lorenzino por Italia y Alemania, una vez que la SEC apruebe la documentación para llevar adelante el canje. Respecto de las observaciones de la SEC, Boudou consideró, días atrás, que "es bastante habitual y normal" este tipo de comentarios.