SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Un chofer de taxi sufrió heridas de gravedad al ser asaltado en la madrugada de ayer en el barrio Arrayanes, lo cual desató la inmediata reacción de sus pares, que bloquearon el tránsito céntrico durante varias horas para exigir mayor seguridad.

Ítalo Parada, de 56 años, conducía el móvil bajo licencia "002" cuando fue abordado por dos personas en aparente estado de ebriedad en la esquina de Onelli y Hermite que le abrieron la puerta trasera del vehículo con fines de robo. Uno de ellos lo atacó a puñaladas, para luego sustraerle la billetera, el celular y los zapatos.

Según lo informado por la policía, Parada sufrió al menos cinco cortes. Uno de ellos le afectó un pulmón y demandó una práctica quirúrgica de urgencia. Al cierre de este envío, el trabajador permanecía internado fuera de peligro en Cuidados Intermedios del hospital Carrillo.

Los asaltantes huyeron a la carrera por el cañadón del barrio Arrayanes, en el Alto de la ciudad y la policía ya tiene datos fehacientes sobre su identidad, que habrían surgido de las pericias dactiloscópicas practicadas en el auto.

El juez actuante libró órdenes de allanamiento que en principio no dieron resultados pero los investigadores confían en detener al agresor en las próximas horas, dado que cuentan también con un compromiso de colaboración por parte de sus familiares.

El violento episodio ocurrió alrededor de las 5 y desde ese momento los taxistas y remiseros montaron una protesta pública por los riesgos que enfrentan para realizar su trabajo, especialmente en los turnos nocturnos.

Desde bien temprano los conductores decretaron un paro y cruzaron sus autos en el Centro Cívico y en la crítica esquina de Moreno y Morales, a 100 metros de la intendencia. Hicieron intentos por sumar a los choferes de ómnibus, sin mayor resultado, aunque un micro de la empresa Tres de Mayo participó del piquete.

El ministro de Gobierno, Diego Larreguy, que estaba en Bariloche por otras razones, concurrió al municipio a escuchar los planteos y por la tarde ofreció por escrito el compromiso de mejorar los controles callejeros, con más personal policial y el auxilio de Gendarmería y Prefectura.

Recién entonces los taxistas levantaron la protesta, que durante casi 10 horas interrumpió la circulación en varios puntos clave y provocó un verdadero caos.

De las gestiones para dar una solución a los taxistas participaron también el nuevo jefe de la Regional Tercera, comisario mayor Argentino Hermosa, el intendente a cargo Jorge Franchini, el legislador Claudio Lueiro y el presidente provisorio del Concejo Municipal, Daniel Pardo.