LA PAZ (DPA) - El presidente de Bolivia, Evo Morales, juró su segundo mandato en La Paz y cumple así, según aseguró, con la prometida "refundación de Bolivia" como un Estado plurinacional y poniendo fin al "fin del estado colonial" que según su visión predominó en la historia reciente del país.

El mandatario juró su segundo a la mañana y recibió los nuevos símbolos del Estado Plurinacional de Bolivia que consisten en una banda presidencial que incluye la "Whipala" (bandera indígena de siete colores) y una medalla de oro con la efigie de los próceres indígenas Túpac Katari y Bartolina Sisa.

Con la asunción se quiso escenificar además la despedida del que Evo Morales considera el "viejo Estado colonial", en vigor desde 1825 en el país sudamericano. "Estoy aquí para refundar la patria, por eso siento que llegó la hora de buscar la igualdad, la dignidad, la unidad en base a la solidaridad de todos nuestros pueblos", destacó el mandatario.

Durante dos horas, Morales durante presentó un informe detallado del trabajo hecho en cuatro años de gobierno, destacando los logros macroeconómicos y el control que tuvo su equipo económico de la inflación.

El vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, por su parte, justificó la transición de Bolivia a un Estado Plurinacional, porque el "viejo Estado colonial" sólo representó a una parte privilegiada de la sociedad boliviana y no articuló el territorio ni a sus regiones, según dijo.

"Sólo representaba a un pedazo de la sociedad boliviana, discriminaba a otros sectores sociales y a otras prácticas políticas. Era un Estado aparente, como señalaba el escritor René Zavaleta Mercado", dijo. García Linera, ideólogo del actual gobierno, enfatizó que "el viejo Estado colonial fue tremendamente racista".

García Linera aseguró que Bolivia tuvo desde 1825 hasta 2005 (180 años), un Estado aparente, porque "excluyó en primer lugar a la mayoría indígena", al recordar que Bolivia es un país de mayoría indígena y que seguirá con esa característica por muchos años más.

"Ahora hay un tejido social para una hegemonía, para unir al pueblo en torno a un proyecto social y estatal creíble hacia un Estado integral que una a regiones y colectividades", agregó.

El jueves, el presidente boliviano, el primer indígena que preside el país, aseguró que arrancó la era "Suma Qamaña" (vivir bien, en aymara). En su primer mandato impulsó con fervor su llamada "revolución democrática y cultural" con una política de nacionalización de los hidrocarburos, y programas sociales para niños, mujeres y ancianos.

"Vivir Bien significa saber escuchar, saber compartir, saber vivir y saber soñar. Es vivir en armonía con todos y todas, y con nuestra Madre Tierra", dijo Morales el jueves en las ruinas de Tiwanaku donde fue proclamado "Apu Mallku" (máximo jefe, en aymara) de los indígenas y pueblos originarios de Bolivia.

Evo Morales, indígena aymara de 50 años, fue reelegido con un 64,22 % en las urnas gobernará por cinco años más (2010-2015) con absoluto control por tener amplia mayoría en la nueva Asamblea Legislativa Plurinacional de 130 diputados y 36 senadores.

La posesión de Morales fue seguida por el presidente Hugo Chávez, de Venezuela; Rafael Correa, de Ecuador; Fernando Lugo, de Paraguay y Michelle Bachelet, de Chile. La argentina Cristina Fernández no asistió y envió un delegación ministerial.