NEUQUÉN (AN).- El episodio de violencia de ayer fue el segundo en pocos días que protagonizan efectivos de la unidad antimotines y estatales de UPCN, un gremio que se hizo fuerte con la administración sobischista y compite en la representación de los trabajadores públicos con ATE. El 30 de diciembre los empleados de Desarrollo Social se enfrentaron con la Policía. Hubo gases, corridas y pedradas. Lo de ayer tuvo sus particularidades. En la mañana los manifestantes cortaron las calles Roca y Rioja, primero. Luego quemaron cubiertas, que la Policía apagó. El clima nunca amenazó con desbordarse. Fue cuando muy cerca de la puerta amenazaron con quemar las cubiertas cuando entró en acción la Policía. Las posturas son intransigentes. En reiteradas oportunidades, Pérez desestimó la posibilidad de dar una suba. Sí dio un aumento, de unos 288 pesos a otra fracción de trabajadores, afiliados a ATE, que cortó rutas y calles durante meses antes de recibirlo. |