NEUQUÉN.- Cantó en un escenario por primera vez a los 8 años, durante un encuentro de canto infantil conducido por Los Arroyeños; formó una banda de rock y ahora toca la guitarra y compone sus temas, destellos del folclore tradicional y trova; tiene devoción por Atahualpa y la música de la tierra, y sostiene que hay que consumir mucha peña para adquirir conocimiento; desde hace un año y medio anda por los escenarios con "Canciones del viento sur", un recorrido por sus distintas etapas compositivas.

Son justamente algunas de esas canciones las que Walter Cuevas envió a los organizadores de la peña de Los Coplanacu (la más importante de Cosquín), con la intención de participar en ese espacio en la próxima edición del festival nacional de folclore. Y lo logró. "Me temblaban las piernas cuando me dijeron", cuenta.

Ahora, el músico y compositor neuquino, de 39 años, afina su guitarra para codearse con el Dúo Coplanacu el 26 de enero, donde cantará acompañado por Fernando Barraza en bajo eléctrico y Guillermo Lavergne en percusión. Pero antes, invita a un concierto "pro viaje a Cosquín" el próximo jueves, "como para juntar algún dinero", dice contento, esperanzado, empapado de los pro y los contra de la movida independiente.

¿Cosquín sigue generando expectativas? "Sí. De hecho todo el mundo se desvive por ir allí. Hay músicos que quieren tocar en ese espacio que sigue siendo como la meca del folclore argentino", responde Walter.

Cuenta que el 2010 viene bien, con la posibilidad de grabar el disco de "Canciones del viento sur" en el estudio El Ombligo, por donde pasaron grandes como Raúl Carnota, Horacio Molina o el "Tata" Cedrón.

- ¿Con "Canciones?" alcanzaste tu propia sonoridad?

- No, porque "Canciones?" por ahora es una ensalada riquísima. Creo que por ahí sería bueno separar esos elementos y combinarlos de otra forma. Es un producto donde hago un recorrido por varias de mis etapas compositivas que pasan por la trova, folclore, algunas canciones de mi vieja banda de rock, algo más acústico y ahora mis nuevas composiciones de folclore.

-¿Crees que hay una nueva forma de hacer folclore, más sutil, con más detalles, como el caso de Fandermole, Juan Quintero, Luna Monti?

-Si hay una nueva forma, pero la única manera de que sea valedera es que hayas consumido antes a "Cuchi" Leguizamón y Castilla, Atahualpa, Falú y Dávalos, a los grandes maestros.

-¿Qué te emociona en este camino?

-La cantidad de gente linda que voy conociendo.

-¿Y los aplausos?

-Por supuesto que eso te emociona. Pero lo genial es ser amigo de Carlos y Juan Nuñez, de Cacho Herrero y Luis Guiñazú o Marcelo Perea. Me junto con gente que hace que crea que lo que compongo es valedero.