Fin de la pretemporada en Mar del Plata para San Lorenzo, con buenas y malas noticias para su entrenador Diego Simeone de cara al próximo torneo Clausura.
Lo bueno tiene que ver con la llegada de refuerzos: Sebastián Rusculleda, Nelson Benítez y Emiliano Alfaro son las caras nuevas que pidió Simeone y los dirigentes ´azulgranas´ le consiguieron.
De las tres caras nuevas, Rusculleda fue el único que tuvo participación en el triangular de verano y lo hizo de manera discreta, demostrando que le falta rodaje con sus compañeros y con el crédito abierto.
Benítez ya jugó en el fútbol argentino -integró el plantel de Lanús campeón- y llegó con las credenciales de un título con el Porto de Portugal. Alfaro es un joven goleador uruguayo que Simeone tuvo entre ceja y ceja, y cuando se confirmó que su futuro era San Lorenzo fue el momento de mayor alegría para el cuerpo técnico durante su estadía en Mar del Plata.
Pero al mismo tiempo se lesionó Juan Carlos Menseguez, es decir un delantero llegó y otro entrenó diferenciado durante la mayor parte de la pretemporada por una tendinitis en el tobillo derecho.
Por su parte Leandro Romagnoli se operó el pasado 7 de diciembre por cuarta vez en su rodilla derecha, lo que lo mantiene en etapa de recuperación. Más allá de que trabajó a la par de sus compañeros en La Feliz, no participó en ninguno de los partidos estivales.
En lo futbolístico hubo dos empates con muchos goles y revelaciones, como el juvenil Nicolás Bertocchi, que mostró atrevimiento ante Estudiantes y cuando le tocó entrar frente a Boca.